Un himno machista
El himno dice "“Andaluces levantaos” ¿y qué pasa con las andaluzas? ¿No se levantan?"
Hay que cambiar urgentemente la letra del himno de Andalucía. O mejor, que el himno no tenga letra. No se puede tolerar en la Andalucía del Siglo XXI tal afrenta al sentido común, a los derechos de las mujeres y al lenguaje no sexista. Ayer, Día de Andalucía, pasé un mal día porque escuché varias veces el himno bajo el nublado de nuestra tierra y a punto estuvo de darme un síncope como reacción a la injusticia.
Cómo es posible que la letra de la música que oficialmente representa a esta zona geográfica sea machista y no promueva la igualdad real entre mujeres y hombres. Y cómo es posible que ningún colectivo feminista o de izquierdas o de izquierda feminista no haya abanderado ya una protesta al respecto. Será que no han oído nunca el himno. O miran hacia otro lado.
“Andaluces levantaos” ¿y qué pasa con las andaluzas? ¿No se levantan? Es una muestra más del heteropatriarcado que lamentablemente impera en Andalucía y que genera el retraso secular de esta tierra situada al sur de Europa, sin lugar a dudas alentado por el españolismo más rancio.
Tal es así, que a las mujeres andaluzas no se les da la oportunidad ni de pedir tierra ni libertad, acciones exclusivamente reservadas a los hombres, que con su intransigencia impiden a las representantes del género femenino exigir la liberación del pueblo andaluz.
En qué estaría pensando Blas Infante, el supuesto padre de la supuesta patria andaluza cuando en 1936 compuso la letra del himno para la música del maestro José del Castillo Díaz. Era la II República, la de las libertades e igualdad, pero no parece que los republicanos de entonces estuvieran muy por la labor. O simplemente que respetaban la norma lingüística por la cual el plural representa al mismo tiempo al género femenino y masculino, aunque eso, en la actualidad, debe ser muy facha.
El himno dice que los andaluces queremos volver a ser lo que fuimos, olvidándose notoria y descaradamente de las andaluzas, es decir que a las mujeres se les impide dar alma de luz a los hombres. Ni tampoco alma de mujer a las mujeres. O en su defecto alma de hombres o mujeres a mujeres y hombres, como debe ser.
Tenemos un himno, con letra, pero muy machista. Aunque nadie dice nada. Nadie levanta su voz. Nadie en su sano juicio – yo no debo estarlo – es capaz de sacar a la palestra tal circunstancia que sin duda es la responsable de la desigualdad entre hombres y mujeres en lo social, lo profesional, lo salarial y todos los aspectos de la vida.
Claro está, si algún representante de colectivo social, sindical, cultural o político de Andalucía se le ocurriese pedir el cambio de la letra del himno andaluz por machista, recibiría la mayor de las censuras, porque es un elemento de la progresía, de la autonomía andaluza que tanto costó conseguir y porque sería una afrenta a todo lo andaluz. ¿Y si el himno de España tuviese letra y ésta fuese tan machista? Habría revolución.