Francisca Alamillo (PSOE), alcaldesa de la localidad cordobesa de Torrecampo, ha sido vacunada ante el Covi-19 sin ser grupo de riesgo, tal y como ha confesado ella misma a través de sus redes sociales. La alcaldesa ha tenido que revelar que había sido vacunada después de la denuncia hecha por el PP del mismo municipio.
Según ha confesado la propia alcaldesa, se le ha inyectado la vacuna Covid-19 en su condición de presidente de la residencia, a la que acude con frecuencia, y que se le vacunó con una de las dosis que sobraron tras vacuna primero a los residentes y trabajadores. En este sentido, el PP de Torrecampo señaló este pasado martes 12 de diciembre que se alegraban "con la noticia de que los residentes y trabajadores de la Residencia Municipal de Mayores habían recibido la primera dosis de la vacuna contra el Covid-19", pero supieron luego los populares que "las trabajadoras que están de baja médica no han sido tenidas en cuenta por la Dirección de la Residencia o por el Ayuntamiento".
Esta última información podría jugar muy en contra de la alcaldesa del PSOE que afirmó que ella fue vacunada por que sobraron dosis de la vacuna. Sin embargo, según expone el PP: "a la hora de solicitar el número de vacunas que se iban a administrar el pasado martes no contaron con ellas (trabajadoras de baja)", cuando "en otros centros donde se ha vacunado sí se ha hecho con esas personas que están de baja médica y se les ha administrado su primera dosis, como al resto del personal, pero aquí no se ha hecho".
La alcaldesa del PSOE se vacunó antes que algunos trabajadores
Esta no es la única "mala decisión" de los socialistas en Torrecampo, pues a la falta de vacuna de los trabajadores se les ha unido que en dicha vacunación se haya incluido a la alcaldesa. "Aún no perteneciendo a ninguno de los grupos llamados a vacunarse en esta primera fase; y saltándose el Plan de Vacunaciones establecido por el Ministerio de Sanidad", reclamaban el PP en su perfil de Facebook.
Dado a que "supuestamente sobraban dos vacunas", en el PP de Torrecampo están de acuerdo en que "antes de tirarlas a la basura, hay que utilizarlas en cualquier persona, sea quien sea, pero; ¿no hubiera sido más lógico utilizar esas vacunas sobrantes en alguna de las trabajadoras de baja médica; que no habían sido tenidas en cuenta y enmendar así parte del error cometido en un principio?, o ¿utilizarlas en cualquiera de nuestros vecinos de avanzada edad?".
Tras estos hechos, el Partido Popular ha "pedido por Registro de Entrada información al respecto" y esperan que la alcaldesa del PSOE de "explicaciones lo antes posible", después de comprobar que "la capitana del barco es la primera que se salva".
Francisca Alamillo se defiende ante las acusaciones
Después de hacerse pública el post en Facebook, la alcaldesa de Torrecampo, Francisca Alamillo; ha decidió responder a las críticas del PP afirmando que todos los residentes y trabajadores en activo de la Residencia Municipal de Mayores fueron vacunados primero y que, aunque se la había incluido inicialmente en el listado de personas a vacunar, dada a su condición de presidenta de la residencia; ella rechazó la opción, y no fue hasta que terminó la vacunación en la residencia cuando aceptó a ser vacunada.
Francisca Alamillo (PSOE)
"La dosis que me ponen no le ha sido hurtada a ningún trabajador del centro y, por supuesto, a ningún residente" del centro; al que, según ha recordado, acude "todas las semanas", en su condición de presidenta de la residencia. Además, según subraya la alcaldesa del PSOE, "se comunica la relación que me vincula a la residencia y mi deseo expreso de no ser vacunada hasta que me corresponda por el grupo de población al que pertenezco", y así se llega a la fecha prevista para la vacunación de residentes y trabajadores, que "era el día 5 de enero, pero debido al retraso en este proceso que hay en Andalucía el Área Sanitaria comunica que avisarán el día antes de llevar a cabo la vacunación".
Esto fue "el día 11 de enero" ya que sería "al día siguiente, el día 12 de enero", cuando "se vacunaría a las personas de la residencia", y "es en ese momento cuando la Dirección del centro" envía "un segundo listado modificado al Área Sanitaria"; ya que "se habían producido variaciones con respecto al que se remitió el día 18 de diciembre".
¿Por qué se puso la vacuna la alcaldesa?
"El día 12 llegan a la residencia las vacunas --relata la alcaldesa-- y las enfermeras vacunan sobre el documento que poseen en ese momento. A la cita no acude una trabajadora y otra a la que en principio se la iba a poner porque no está prestando servicios por fin de contrato". Como consecuencia de ello, "al final, sobran dos vacunas y las enfermeras pidieron a la Dirección del centro que llamara a dos personas rápidamente y el director dijo que en 30 segundos se presentarían dos personas", reclama la alcaldesa en su cuenta de Facebook, excusándose del uso de la vacuna Covid-19 que se ha suministrado.
"Ante esta situación y teniendo en cuenta que habían indicado que las personas de baja no se vacunan; la Dirección del centro llama a la auxiliar que inicialmente estaba en el listado, pero ahora no está prestando servicio en el centro, que será la próxima auxiliar que se contrate y que no está de baja"; y también llama a Francisca Alamillo, "como presidenta", puesto que acude al centro "todas las semanas"; por lo tanto, y según ha insistido la alcaldesa, la dosis que le ponen "no le ha sido hurtada a ningún trabajador del centro y, por supuesto, a ningún residente".
