viernes. 29.03.2024

XC Palo Cortado “de ida y vuelta” regresa a bordo del “Juan Sebastián de Elcano”

El Buque Escuela de la Armada “Juan Sebastián de Elcano” regresa al puerto gaditano tras cinco meses navegando

Tras más de cinco meses de navegación en viaje “redondo” a bordo del Buque Escuela de la Armada, XC Palo Cortado “de ida y vuelta” ha llegado al Puerto de Cádiz. Le ha dado la bienvenida Mauricio González-Gordon, presidente de González Byass, que ha recibido de manos del Comandante Capitán de Navío Elcano, Ignacio Paz García, el Manifiesto de Cargo firmado.

Este documento certifica que el vino ha viajado y completado con éxito el 90º crucero de instrucción del Juan Sebastián de Elcano. Por su parte, Antonio Flores, enólogo de la bodega jerezana, ha catado y mostrado a los asistentes cómo ha evolucionado el vino tras concluir su periplo por los océanos Atlántico y Pacífico.

Con este excepcional Palo Cortado, González Byass conmemora el 5º centenario de la Primera Vuelta al Mundo realizada por la expedición Magallanes-Elcano, que embarcó varias “botas” de Jerez, como consta en el libro de bastimentos que se conserva en el Archivo de Indias.

Cinco siglos más tarde, la bodega jerezana y el Buque de la Armada de España han llevado, en esta travesía histórica, la magia y singularidad del Jerez a las escalas realizadas en Funchal (Portugal), Las Palmas de Gran Canaria (España), Río de Janeiro (Brasil), Montevideo (Uruguay), Buenos Aires (Argentina), Ushuaia (Argentina), Punta Arenas (Chile), Valparaíso (Chile), El Callao (Perú) y Charleston (EE.UU.). Las de Río de Janeiro, primera tras cruzar el Atlántico y donde un grupo de expertos pudieron catar este Palo Cortado, y Valparaíso, donde la llegada del Juan Sebastián de Elcano despertó un gran interés, fueron las más destacadas de esta singladura que comenzó el 11 de febrero en Cádiz.

Tras 182 días recorriendo los mares, esta joya de colección ha alcanzado el súmmum y será embotellada por González Byass, que recupera la tradición histórica de embarcar vinos en las largas travesías y rinde homenaje a los marineros que dieron la vuelta al globo por vez primera en el siglo XVI.

Estos vinos, conocidos como de “Ida y Vuelta”, fueron muy populares en el comercio de ultramar llegando a quintuplicar su precio al regresar a Cádiz. La notable mejora en sus cualidades organolépticas y singularidad, se debía a factores como la temperatura, la presión y, sobre todo, el vaivén continuo de las olas del mar.

XC Palo Cortado “de ida y vuelta” regresa a bordo del “Juan Sebastián de Elcano”