viernes. 19.04.2024

El trabajo humanitario, más necesario que nunca

134 millones de personas necesitan ayuda para sobrevivir en todo el mundo, y se requieren más fondos que nunca para poder atenderlas

Con motivo de la conmemoración, el 19 de agosto, del Día Mundial de la Asistencia humanitaria es de recibo sumarse a la petición para responder a las crisis y emergencias y apoyar a las personas que trabajan en la entrega de la ayuda.

Los conflictos armados siguen siendo el principal detonante de las crisis humanitarias, junto a los desastres naturales, cada vez más agravados por el cambio climático.

Necesidades creadas por guerras como las de Sudán del Sur, Siria o Yemen, conflictos prolongados como los de República Centroafricana o República Democrática del Congo, o sequías como las que este año afectan especialmente al Sahel (Burkina Faso, Mauritania o Senegal) precisan una respuesta adecuada de la comunidad internacional, incluyendo al gobierno español.

Oxfam Intermón exhorta al gobierno de Pedro Sánchez a cumplir con su compromiso de elevar la ayuda oficial al desarrollo al 0,4% de la Renta Nacional Básica en el 2020. De ese porcentaje, el 10% debería dedicarse a ayuda humanitaria o de emergencia.

“Creemos que no es mucho exigir que se llegue al 0,4% de la RNB”, dice José María Vera, director general de Oxfam Intermón, “sobre todo si tenemos en cuenta que hace casi medio siglo, en 1970, que la ONU fijó la meta del 0,7%. En el caso de la ayuda destinada a respuesta humanitaria, hablamos no de porcentajes sino de vidas humanas: campesinas de Mauritania, padres de República Centroafricana, refugiadas huidas de la guerra de Sudán del Sur. Tenemos un imperativo ético e incluso legal para hacer todo por salvar esas vidas”.

Según el último informe de Oxfam Intermón sobre la Ayuda Oficial al Desarrollo, el Gobierno destina 1.900 millones de euros a AOD, el 0,17% de la Renta Nacional Bruta. De ellos sólo 51,3 millones son para ayuda humanitaria. “Es una cantidad indigna de un país solidario como España”, considera Vera.

Si tomamos el ejemplo de Yemen, vemos que la cifra destinada a la ayuda humanitaria es mil veces menor que la de las exportaciones de armas a la coalición encabezada por Arabia Saudí que bombardea el país desde el año 2015. “Confiamos”, dice Vera, “en que el gobierno de Pedro Sánchez acabe con esta incoherencia que se traduce en un gran sufrimiento para la población”.

A nivel mundial, las tres emergencias que requieren más financiación, según Naciones Unidas, son en estos momentos, la crisis de Siria, Yemen y Sudán del Sur.

En Yemen, considerada por la ONU como la crisis humanitaria más grave, con un 75% de la población necesitado de ayuda, 237 trabajadores y trabajadoras de Oxfam llevan a cabo programas de agua, seguridad alimentaria, medios de vida y género que han beneficiado hasta ahora a 2,8 millones de personas. El 90% del personal de Oxfam en Yemen es nacional.

En todo el mundo, durante el último año, la organización ha llevado ayuda a diez millones de personas en más de 40 países. Entre las emergencias más recientes a las que ha dado respuesta se encuentra el terremoto de Lombok (Indonesia) o el último brote de ébola en Beni (República Democrática del Congo).

La seguridad de los cooperantes

La República Centroafricana ha sido en el último año el país más peligroso para los trabajadores de Oxfam Intermón, con un total de 18 incidentes, seguido de Chad. La mayoría de los incidentes (61%) se registran en el trayecto o en los lugares en los que la organización implementa sus programas, es decir, ocurren mientras el personal humanitario cumple con su misión.

La protección de los trabajadores y trabajadoras humanitarias es esencial, no sólo por su seguridad sino para la población que depende de esa asistencia para sobrevivir, por lo que Oxfam Intermón se suma a la campaña #NoSonUnObjetivo con la que la ONU exige a los líderes del mundo que hagan todo lo que esté en sus manos para proteger a todas las personas civiles en zonas de conflicto.

Oxfam Intermón cuenta con alrededor de 800 personas trabajando en 29 países. De ellas la gran mayoría (700) son población local, y otras cien expatriadas, desde España u otros países. En toda la confederación Oxfam, formada por 20 afiliados con proyectos en 90 países, trabajan más de 10.000 personas.

El trabajo humanitario, más necesario que nunca