viernes. 29.03.2024

Máxima expectación ante la gala final de OT 2018

Finaliza una edición caracterizada por sus sonadas polémicas

Todo llega a su fin. Todo tiene término. Sobre todo en cuestión de concursos televisivos de temporada. Una asombrosa medida del tiempo es el barómetro semanal de los talent de la pequeña pantalla. Pongamos que hablamos de OT. Que deja caer las hojas de su calendario como una margarita que se deshoja muy rápidamente. Este miércoles 19 se cierra una nueva edición.

O se apaga. Se da carpetazo a la segunda renovada temporada o a la décima si tenemos en cuenta el cómputo de todas las ediciones. En esta ocasión también podemos asegurar que hubo actuaciones de nivel, a la altura exigible. Pero no fue la tónica común. Porque la latente que ha marcado esta edición ha sido la polémica. O, por mejor decir, las polémicas…

Polémicas absurdas unas y polémicas innecesarias otras y polémicas teledirigidas la mayor de las veces en aras de una progresía de cartón piedra. Ya sabemos: el adoctrinamiento ideológico que se ha apoderado también del fundamento estrictamente artístico de este concurso musical. Desde el cacareado “mariconez” en la letra de Mecano hasta la impropia visita del novio de María.

O el carácter demasiado rebelde y pechisacado de unos alumnos que a menudo parecían sobrados de experiencia y sabiduría. Más bien importar esa sapiencia y esa sabiduría que, por razones obvias, aún no podían poseer. En la noche de este miércoles 19 se conocerá el ganador o ganadora de OT 2018. Aunque, como está demostrado, un primer premio en absoluto garantiza el éxito.

Máxima expectación ante la gala final de OT 2018