miércoles. 24.04.2024
Servando marcó un tanto decisivo en Valladolid.
Servando marcó un tanto decisivo en Valladolid.

Esa suerte que tantas veces ha sido esquiva

Pese a sus pobres estadísticas en la segunda vuelta, el Cádiz afrontará sus dos últimos partidos en puestos de playoff y frente a rivales con poco o nada en juego

La derrota del pasado fin de semana dejó una sensación muy amarga entre los aficionados cadistas. Y la forma en la que se produjo mucho más. Caer ante un filial que estaba en puestos de descenso y, sobre todo, entregar el partido en tan poco tiempo provocó la ira de muchos seguidores y alimentó las suspicacias de los que piensan que la entidad no apuesta por el ascenso.

Servando marcó un tanto decisivo en Valladolid.

Malos días en el fútbol se tienen en cualquier momento. Es evidente que si este partido se hubiese disputado en la jornada 4 nadie tendría 'malos' pensamientos. De hecho, los amarillos cayeron de forma estrepitosa ante el hoy desahuciado Lorca en la primera vuelta y a nadie se le ocurrió plantearse que se hubiesen dejado de ir, un argumento muy recurrente tras el descalabro del Mini Estadi.

La dura competencia en la Liga 123 es palpable y evidente. Precisamente, ese filial azulgrana venía de derrotar al todopoderoso Sporting. En este contexto conviene recordar lo ocurrido, sin ir más lejos, con el hasta hace poco líder Rayo Vallecano, conjunto que cayó en casa frente al débil Córdoba y que este pasado fin de semana fue vapuleado por un Alcorcón que lucha por salir de la quema.

Al margen de eso, la buena noticia es que los de Cervera han conseguido mantener a duras penas su posición de playoff pese a una segunda vuelta muy pobre en el apartado de victorias. La suerte que tantas veces ha sido esquiva parece que empieza a ser favorable. De hecho, en la última jornada disputada, un triunfo de Numancia u Osasuna en su duelo directo le hubiese sacado de esa situación de privilegio. Sin embargo, se produjo el deseado empate rezado por el cadismo.

Esa pizca de suerte también permitirá afrontar las dos últimas jornadas ante rivales con poco o nada en juego. El Tenerife tiene una opción muy remota que pasa por ganar en Carranza y esperar que el propio Cádiz y todos los equipos que tiene por delante fallen en sus dos últimos partidos, algo improbable sobre todo precisamente en el caso de Osasuna y Numancia que se miden en la próxima fecha a Lorca y Sevilla Atlético respectivamente.

Algo parecido ocurre con el Granada, que supera al Tenerife en un punto y que no solo debe ganar sus dos últimos choques sino esperar que ninguno de los equipos que le antecede sea capaz de sumar una victoria en estas dos apasionantes jornadas.

Para colmo de bendiciones, esta penúltima jornada contempla un Zaragoza-Valladolid, otro enfrentamiento directo cuyo resultado siempre beneficiará a los intereses amarillos, en caso de que estos logren el triunfo ante el Tenerife.

Esa suerte que tantas veces ha sido esquiva