El drama de Naomi Jacobs: se despertó olvidando los últimos 15 años de su vida

Una pesadilla de ojos abiertos con una explicación psiquiátrica

¿Qué pensarías si una mañana te despertaras pensando a conciencia que has vuelto a la adolescencia? Sería, cuanto menos, una pesadilla kafkiana. Así le ha ocurrido a Naomi Jacobs, que se despertó un día -cierto día- creyendo que tenía 15 años. Ahora lo ha confesado. Le sucedió en 2008, y en realidad tenía 32 años: no reconocía ni la habitación en la que se encontraba ella misma…

“Salté de la cama y me vi en el espejo. Mi cara había cambiado. Me veía pálida y supe que había envejecido. Cuando hablé en voz alta por primera vez, mi voz sonaba muy diferente”, cuenta en una entrevista a la BBC. “Pensaba que tenía 15 años. Todos mis sentidos, todas mis emociones eran las de una chica de 15 años. Y creía que era 1992”, subrayó esta mujer británica.

No supo qué hacer. Había que reconstruir los últimos años. La realidad de los últimos años. Su hermana y su mejor amiga fueron cómplices en la reconstrucción de 15 años de vida. Para redescubrir todo lo que había pasado, todo lo que había sucedido durante ese amplio espacio de tiempo. Tanto a nivel personal como en la vida e historia actual, habida cuenta vivía donde Sadam Husein gobernaba en Irak, aún vivía la princesa Diana y era impensable que “un hombre negro” llegase a ocupar la Casa Blanca.

¿Cuándo le llegó el shock en el plano personal? Cuando descubrió que tenía un hijo de 10 años. De nombre Leo. “Durante las primeras 24 horas no podía comprender el hecho de que tenía un hijo, aunque me dijeron que sí, y lo vi y me maravilló”, asegura. Y es que, como era hasta comprensible, la realidad que descubrió sobre ella era completamente diferente a lo que imaginaba que sería con 15 años: madre soltera, desempleada y estudiante de psicología, y dependiente del Estado para pagar sus gastos y tener vivienda”.

Ayudaron sus diarios. Quién lo diría. Los diarios respondieron a muchas preguntas acerca de la década y media que había perdido. Entre las que se incluían algunas verdades claramente devastadoras. Como, por ejemplo, adicción a las drogas o que había sufrido abusos sexuales cuando era niña. El hallazgo de estos episodios fue horroroso.

“Fue mortificante. Nunca imaginé como adolescente que esa sería mi vida. Estaba devastada. No podía creer que así era como había elegido lidiar con la realidad (...). El momento que cambió todo fue cuando descubrí en los diarios que había sido abusada sexualmente siendo niña. Y que había enterrado esa memoria desde los 6 años hasta que cumplí los 25”.

Naomi no daba crédito y seguía sin saber por qué no recordaba nada a partir de sus 15 años. La respuesta se la dio un psiquiatra años más tarde: amnesia disociativa, esto es, un tipo muy raro de amnesia que viene provocada por estrés severo. Todo tiene su explicación. Cuando Naomi tenía 15 años, en su familia “hubo mucho estrés. Mi unidad familiar se había derrumbado. Mi padrastro se había ido. Mi relación con mi madre se fracturó”. Además, con su progenitora tuvo “una pelea bastante agresiva en la que ella terminó bebiendo y yo tratando de suicidarme”.

La música todo lo puede. Meses después de perder sus recuerdos, una melodía le hizo recordar un fragmento de su vida que había olvidado y, poco a poco, paulatinamente, gradualmente, Naomi fue recuperando la memoria gracias a las “pequeñas cosas. Un sabor, un sonido, una canción, un aroma”, enumera.

Fue tres meses más tarde, cuando se despertó y se sintió distinta: “Igual que cuando fui una adolescente que se despertó en el futuro. Sentía como que estaba en un sueño”. Toda esta experiencia le hizo cambiar el modo de ver su vida, retomó la relación con su madre y de todo ello nació un libro, ‘Forgotten Girl (La chica olvidada)’. ¿Olvidada, olvidadiza?