El punto de acopio de inertes de Pelagatos entra en funcionamiento

El Ayuntamiento cifra el ahorro que este servicio proporcionará en 15.000 euros al año

El punto del acopio de materiales voluminosos e inertes ha entrado en funcionamiento en la parcela anexa al Área de Reciclaje de Pelagatos. Así, esta misma semana los camiones pertenecientes a las delegaciones de Medio Ambiente, Vías y Obras y empresas contratistas que prestan servicios de recogida de muebles, enseres y restos de inertes han comenzado el depósito de residuos en las nuevas instalaciones. Posteriormente estos materiales son trasladados por los vehículos de Biorreciclaje de Cádiz a la planta de Miramundo.

En este sentido, el delegado municipal de Medio Ambiente, Joaquín Páez, asegura que “estamos de enhorabuena porque la puesta en marcha de estas instalaciones supone un importante ahorro estimado en torno a los 150.000 euros al año. De esta forma, los vehículos de pequeño tonelaje que prestan una labor tan relevante para el municipio como la recogida de inertes no tienen que desplazarse más allá de Pelagatos para depositar los residuos, lo que les permite optimizar mucho mejor sus horas de funcionamiento y el consumo de combustible”.

Asimismo, el edil recuerda nuevamente que “estas obras no han supuesto desembolso alguno para las arcas municipales, puesto que la inversión realizada de 17.000 euros, IVA incluido, ha corrido a cargo de la empresa Biorreciclaje de Cádiz, responsable del traslado de los materiales hasta la planta de Miramundo”.

Hay que destacar que la parcela en la que se ha construido el punto de acopio se sitúa en la parte trasera de las actuales instalaciones del punto limpio. Así, anteriormente fueron utilizadas como planta para el tratamiento de restos de hormigón y que habían quedado en desuso.

Por otro lado, las obras realizadas por Biorreciclaje, empresa que asume las competencias para el transporte y gestión de dichos residuos, han consistido en la limpieza de la parcela y eliminación de los fosos existentes para su nivelación; la demolición de uno de los muros y el recrecimiento del resto de los existentes hasta la cota necesaria. Para una correcta terminación, se enfoscaron y pintaron sus caras vistas y se instalaron las mallas de torsión necesarias. Como actuación complementaria se procedió a la reparación del desagüe de pluviales, relleno, compactado y perfilado de la cuneta de evacuación de aguas, hormigonado con una capa de 10 centímetros sobre la que se colocaron piedras de escollera para evitar la erosión y, por último, la colocación de dos proyectores dotados de detector de presencia en las columnas existentes en el punto limpio.