No hay relajación prevista en Andalucía. Al contrario que en otras comunidades donde ya se clama por el fin de la mascarilla, la comunidad presidida por Juanma Moreno la mantendrá de forma obligatoria varias semanas.
Jesús Aguirre, consejero de Salud y Familias de la Junta de Andalucía, ha sido tajante. La elevada tasa de incidencia en relación a otras regiones obliga a mantener la mascarilla hasta "finales de julio o mediados de agosto". Se sigue considerando la mejor medida para prevenir un nuevo repunte de casos de Coronavirus.
El propio Aguirre se muestra contrario al debate abierto sobre su posible relajación, de hecho ha criticado que Pedro Sánchez y el Ministerio de Sanidad se muestren partidarios de su eliminación al aire libre.
Falsa expectativa de relajación
"Es un debate que no me gusta porque creamos una falsa expectativa de relajación", ha comentado el consejero andaluz de Salud, que se ha declarado así "en contra de que se abra un debate estéril" con el que "no ganamos nada, sólo bajar la guardia", según ha opinado.
De igual manera ha dejado claro que en Andalucía "no se va a levantar la mascarilla, primero, hasta que no decaiga la Ley 2/2021, que es la que obliga de forma taxativa a las comunidades autónomas al uso de mascarillas en lugares públicos tanto abiertos como cerrados", y "hasta que no tengamos como mínimo un 75% de inmunidad total entre la población andaluza", es decir, "inmunidad de grupo" con esa proporción de población vacunada con las dos dosis, según ha subrayado.
Finalmente, el propio Aguirre ha matizado de nuevo que solo la utilización de la mascarilla y la velocidad alcanzada por la campaña de vacunación contra la pandemia conseguirán esa ansiada inmunidad de grupo que, en su opinión, no llegará probablemente hasta bien entrado el mes de agosto.
