La gran diferencia que hay entre todos los seres humanos que coexistimos en este mundo, llega incluso hasta la forma de ingerir los nutrientes necesarios para nuestro organismo y su exigencia diaria; sin embargo, en torno a este hecho, hay una serie de teorías que es importante desmentir o confirmar, en especial, en relación a la nutrición: mitos de la alimentación vegetariana.
Estos mitos son realmente comunes en la alimentación vegetariana, que si bien tiene un importante fundamento científico, no cuenta con la suficiente información pública para que no te confundas y puedas elegir qué es verdad, y qué simplemente es un invento de la infinita imaginación humana. Entre los mitos más comunes, se encuentran los siguientes:
La alimentación vegetariana disminuye tu fuerza
Este es un de los mitos más comunes para este tipo de alimentos. La creencia popular encuentra la fuerza producida por la grasa, y celularmente hablando, tiene algo de sentido, sin embargo, esta grasa utilizada por el cuerpo puede ser extraída de otro tipo de alimentos, que puedes encontrar fácilmente en los platos vegetarianos.
De hecho, si tu dieta vegetariana es diseñada por un nutricionista especializado, tus platos no solo van a mantener tu estado corporal y los procesos fisiológicos del mismo, sino que también este va a mejorar y puedes prevenir algunas enfermedades, en especial infecciosas, que provienen de la alimentación de carnes y productos animales.
A tu dieta vegetariana pueden agregarse productos como el huevo y la leche de forma regular, que serán importantes, por su peso molecular, en el mantenimiento de tu organismo y sus procesos. Esta ingesta no tiene por qué ser frecuente, todo lo contrario, puede ser a demanda o como más te sientas cómodo.
Si eres vegetariano tienes que ser mejor amigo del DHA
Tiene algo de cierto la afirmación que dice que el aporte de DHA en los alimentos que normalmente componen la gastronomía vegetariana y vegana, es realmente bajo; sin embargo, no hay necesidad para los niveles de energía celular de componente.
Este hecho es avalado científicamente, pues el DHA sí es capaz de generar beneficios para el organismo humano, pero su deficiencia no produce o desarrolla alguna enfermedad, ni descontrola algún nivel de servicio, por lo que puedo decir con base científica y con pruebas nutricionales, que este mito es totalmente falso.
Generalmente, un profesional sanitario muy desinformado puede confundir este aspecto con la necesidad de energía de las cellas para el metabolismo celular, pero no tienes por qué preocuparte si esto es de tu especial atención.
Dos kilos de carne tienen menos proteína que un poco de espirulina
Las personas veganas tienden a inventar razones por las que elegir su régimen de alimentación, y aunque no es necesario explicar lo que quieres hacer con tu vida, lo que sí está mal es desinformar. La espirulina es un tipo de alga que es especialmente utilizada en los platos vegetarianos por su relativamente alto en proteínas esenciales para tu cuerpo.
Es una planta de alto valor biológico, porque tiene un alto nivel nutricional, aportando antioxidantes, vitaminas, minerales y proteínas; pero contrario a la creencia popular, esta alga en poca cantidad solo es capaz de aportarle al cuerpo 5 gramos de proteína máximo a tu organismo, cuando dos kilos de carne magra le aporta por lo menos 400 gramos.
Puedes ver la espirulina en plantas, guisos y un sinfín de presentaciones que sí van a ser beneficiosas para tu cuerpo, pero es completamente falso que aportará más proteína que cualquier tipo de carne.
Ser vegetariano= ser delgado
Este mito es definitivamente incorrecto, porque aunque tu cuerpo tendrá una composición mucho más saludable y consistente, por el alto contenido de celulosa de cada plato, ser vegetariano no te asegura ser delgado, esto dependerá directamente de la velocidad de tu metabolismo y de la cantidad de tus porciones.
En este punto, tienes que aprender a diferencias a las personas veganas de las vegetarianas. En este mismo orden de ideas, las personas veganas son las que están en completo desacuerdo con el maltrato animal, por cuestiones éticas; en cambio, las personas vegetarianas tienen razones de salud, cultura o simplemente preferencias, pero esto sin ningún componente ético.
Esta serie de elementos que componen tus ambiciones y costumbres, pueden influir positiva o negativamente en tu peso corporal, por lo que ser vegetariano no tiene nada de relación con tu contextura física.
Pierdes capacidad mental si dejas de comer carne
Pocas cosas de esta lista son tan poco lógicas como esta, pues la carne y sus componentes no tienen relación alguna con las actividades cerebrales que actúan en la funcionalidad de la memoria, la inteligencia y cualquier capacidad intelectual.
Este hecho se suma al increíble aporte vitamínico, proteico y de aguas, sales y minerales, que dan los vegetales al cuerpo humano, por lo que el cerebro se verá directamente beneficiado; de hecho, la alimentación vegetariana tiene la capacidad, mediante algunos platos, de oxigenar y mejorar las funciones neuronales y las conexiones sinápticas que lo permiten.
Por ejemplo, los ácidos grasos que conocemos como Omega 3, que son esenciales, aunque el cuerpo humano no tiene la capacidad de producirlo, son frecuentemente encontrados en las nueces, los aceites vegetales, las almendras y algunas plantas, lo que confirma que los alimentos completamente vegetarianos, son realmente buenos para tu cuerpo.
Ser vegetariano es costoso
El precio de los alimentos es variable de acuerdo a tu zona de residencia o la producción de este, sin embargo, los vegetales son algo necesario para complementar cualquier plato, por lo que siempre es importante tenerlos en casa; si a esto le sumamos que ya no comprarás carne de ningún tipo, se hace cada vez más atractivo para tu bolsillo.
Este mito es evidentemente falso, por lo que ser vegetariano termina resultando, incluso, mucho más económico que una alimentación regular con productos animales. Por supuesto, debes evitar los alimentos vegetales con conservantes y agregados de glucosa, porque esta suele ser muy dañina para el cuerpo.
La alimentación y las costumbres que rigen esta, son diferentes de persona a persona, siempre hay muchos mitos sobre la alimentación vegetariana, pero si es lo que realmente quieres con tu vida y con tu cuerpo, deberías dar el paso y hacerle caso a tus instintos, esto avalado por importantes científicos y la Organización Mundial de la Salud (OMS).
