Su acto contra obligatoriedad del 'puto catalán' no ha quedado en saco roto sin duda. Cada vez queda más claro que critica su obligatoriedad para muchos puestos de trabajo públicos en Cataluña tiene sus consecuencias finales. Y así ha ocurrido con una enfermera gaditana.
De esta manera, el Hospital del Vall d’Hebron ha decidido no renovar el contrato de la enfermera que apareció en un vídeo junto a dos compañeras criticando la obligación de tener el nivel C1 de catalán para poder optar a una plaza fija en el sistema catalán de salud.
Generalidad, TV3, Rac1 y Puigdemont se lanzan contra una una enfermera gaditana que se queja de los requisitos lingüísticos separatistas (título del C1 en catalán) para opositar a una plaza.
— Un ciudadano cualquiera (@niduaz) March 3, 2023
Fomentan el odio a todo lo q no sea Cataluña y el catalán… pic.twitter.com/RgprM5dFVO
Hay que especificar que el departamento de Salud de la Generalitat que, a principios de mes, ya había anunciado la apertura de un expediente a la enfermera por haber publicado el vídeo en redes sociales en horario laboral y sin máscara, aunque no por el contenido de las declaraciones. Ahora, cualquier otra medida en contra de la empleada queda suspendida.
Venganza de la Generalitat contra la enfermera gaditana
A este respecto, hay que indicar que el expediente de información reservada que se le abrió ha seguido su curso pero, al no tener más vinculación con el centro, "cualquier hipotética actuación disciplinaria queda suspendida", aunque eso sí, no se le renueva el contrato.
Como se recordará en el vídeo, la enfermera, que se identifica como originaria de Cádiz, junto a otras dos compañeras de trabajo, una de Granada y la otra de San Sebastián, criticaba el hecho de que para obtener una plaza fija en el hospital es necesario contar con un nivel C1 de catalán.
Mientras la gaditana expresa sus quejas y rechazo en aprenderlo, la de San Sebastián afirma que ya se ha apuntado a aprender el nivel básico de esta lengua y pronuncia algunas frases en un catalán correcto. A lo que la autora del ‘tiktok’ contesta: "Por favor, me estás desmontando el vídeo".
En estado de baja por ansiedad
La joven gaditana de 25 años ha pasado las últimas semanas de baja por un cuadro de ansiedad tras ser hostigada por haber clamado contra el 'puto C1 de catalán' a través de las redes sociales. "Ahora mismo me da mucho miedo salir a la calle".
"Hay gente que está muy loca y puede venir a darme una paliza. He recibido un montón de amenazas", transmitió a sus compañeros de hospital tras revelarse el vídeo de Tik Tok en el que cargaba contra las exigencias lingüísticas del Govern.
El propio consejero de Salud de la Generalitat participó del señalamiento hacia la enfermera. "Declaraciones como éstas son intolerables en una servidora pública. Desde el centro hasta el Departamento de Salud llegaremos hasta el fondo de la cuestión" señalaba en su momento.
