Universitarios de la UCA denuncian el sistema de evaluación impuesto "sin ser consultados"

"Solo queremos y rogamos recuperar el sistema de evaluación que siempre hemos tenido, pudiendo examinarnos de las asignaturas al completo en los finales de junio"

La crisis del Coronavirus ha afectado en mayor o menor medida a todos los sectores de la sociedad. Ni si quiera los estudiantes han salido indemnes de la pandemia mundial que ha azotado a España en los últimos meses y que seguirá presente en nuestras vidas hasta el hallazgo de una vacuna que ponga fin al Covid-19.

Ante la excepcional situación, el Sistema Andaluz de Universidades, la Consejería de Economía, Conocimiento, Empresas y Universidad, y la Dirección de Evaluación y Acreditación (DEVA) de la Agencia Andaluza del Conocimiento tomaron la decisión de dar por finalizadas las clases presenciales durante el reciente curso.

Sin embargo, se acordó que cada Universidad aprobaría sus criterios académicos de adaptación válidos para todas las titulaciones y elaborará agendas a las guías docentes con las adaptaciones que se acuerden.

Eso sí, la Junta de Andalucía subrayó en su momento que todas las adaptaciones en la metodología docente y métodos de evaluación "deberán ser comunicadas a los estudiantes con la suficiente antelación".

Igualmente, hace solo unos días, el ministro de Universidades dejaba en el aire que puedan celebrarse los exámenes tal y como estaban previstos al principio del curso 2019-2020.

"Dependerá de la situación de junio, pero en cualquier caso, no podrán ser como siempre", ha aventurado Manuel Castells.

Siempre que lo permitan las autoridades sanitarias, insistía Castells, los exámenes presenciales deberían realizarse con "distanciamiento social" y evitando "densidad en las aulas", aunque el titular de Universidades aconseja que todas las evaluaciones se planifiquen ya de forma telemática para evitar "improvisar en el último minuto exámenes online".

Pero Castells también ha pedido al profesorado que tengan más en cuenta que nunca al alumno: "Los estudiantes necesitan información y también ser oídos ante las circunstancias excepcionales en las que siguen el curso académico desde el decreto de confinamiento. Hay que ser muy flexible, hay que adaptarse a las condiciones que cada estudiante está teniendo".

Sin embargo, a pesar de todo, la polémica está servida en la Facultad de Ciencias de la Universidad de Cádiz y los estudiantes están en pie de guerra ante el modelo de evaluación "impuesto sin ser ni siquiera consultados".

Los estudiantes denuncian la eliminación de la convocatoria de junio, tal y como estaba planteado en diversas asignaturas antes del inicio de la misma y su sustitución por una evaluación continúa.

Ante la delicada situación, un grupo de universitarios ha decidido poner en marcha una recogida de firmas a modo de denuncia a través de la plataforma online de peticiones Change.org.

En tal petición, los alumnos exponen: "Durante estos tiempos inciertos en los cuales todos hemos tenido que cambiar de un modo u otro nuestras vidas, la Facultad de Ciencias de la Universidad de Cádiz ha decidido que, en vez de mostrar su ayuda y apoyo a los estudiantes, va a complicarles aún más si cabe esta situación, eliminando la convocatoria de junio de diversas asignaturas de los cinco grados que alberga".

"En su lugar, plantean seguir una evaluación continua, pero ¿y los que les faltó algún parcial antes de esta situación? No se les va a asegurar hacerlo. ¿Y los que no son de primera matrícula y no pueden seguir la continuidad de trabajos y parciales? Pierden una convocatoria. Siendo más extremistas, ¿aquellos cuyas condiciones no se lo permiten, ya sea por trabajo, salud o familia? Perderán el dinero de esta convocatoria", continúan denunciando.

Debido a la excepcionalidad de las circunstancias, los alumnos matizan que "no pedimos un aprobado general, ni que se nos devuelva el dinero de las matrículas, solo queremos y rogamos recuperar el sistema de evaluación que siempre hemos tenido, pudiendo examinarnos de las asignaturas al completo en los finales de junio".

Los estudiantes son conscientes de que "es una situación complicada para todos, es comprensible que las condiciones de la educación no sean las mismas que de forma presencial, pero no por ello se nos debe quitar esta oportunidad".

Lo más polémico de todo este embrollo es que los propios alumnos han denunciado "el acoso que han recibido dos compañeros por parte de la facultad". Al parecer, estos estudiantes "han recibido llamadas por parte de la facultad pidiendo explicaciones sobre porque habían firmado en la recogida de change.org y pidiendo que retiraran su firma".

En un documento enviado por el Decano de la facultad a los alumnos el pasado 18 de abril ya se recogía lo siguiente: "Para las asignaturas del segundo semestre, nos encontramos realizando ahora mismo los documentos que nos solicitan las administraciones en las que detallemos los cambios respecto a la ficha 1B que se os informó al inicio del semestre. Estos documentos, llamados adendas, están siendo elaborados por los equipos docentes de las asignaturas de acuerdo al formato de la resolución y nos han dado de plazo hasta el 24 de abril para los profesores y departamentos y, después han de ser aprobados y validados por la Comisión de Garantía de Calidad de la Facultad de Ciencias hasta el 1 de mayo".

Dicho documento añadía que "por tanto, no se os va a informar de nada hasta que no sean definitivas, aunque intentaremos que las que se vayan visando, se os vayan informando adecuadamente por los profesores. En este sentido, os informo que para estas asignaturas prima el concepto de evaluación continua y el examen final ha perdido peso respecto a la evaluación presencial".