jueves. 25.04.2024

"Cuando murió mi madre se desmoronó todo"

Shaila Dúrcal se confiesa en el programa de Bertín Osborne

Telecinco sigue reinando, con banderola de audiencia en ristre, durante las noches de los viernes. Bertín Osborne tiene toda la culpa culpita. No posee rival en la pequeña pantalla. El salón de nuestras casas se prolonga en el del cantante o en el de sus invitados, según el caso y la ocasión. Shaila Dúrcal fue la protagonista de este viernes 12. Para ello Bertín ha tenido que viajar hasta Houston. Una casa que ella misma define como “un cuento de hadas”. Amplia, muy diáfana. Con luz reinante. Con guitarras en derredor.

Confesó mucho Shaila. Por ejemplo que a raíz del accidente doméstico que le hizo perder parte de un dedo -hace casi un año-: “Dejé de fumar a raíz de todo aquello, y he engordado unos 20 kilos, pero me da igual”.

Es feliz, está feliz: contenta con ella misma. Libre, siempre libre. Y se retrotrae no obstante a la infancia: "Tengo buenos recuerdos del colegio, pero pasé bullying porque siempre tuve problemas de peso y se metían mucho con eso. Es una época muy difícil para las mujeres, mis padres viajaban mucho... Toda mi vida he batallado con eso, hoy por hoy también, pero voy aprendiendo porque de adulto ya entiendes por dónde van los tiros".

Ahora, y desde que tuvo el accidente, ha explicado que ha cogido bastante peso porque aprovechó y dejó de lado a uno de sus mayores vicios: el tabaco. Por ese motivo asegura que le da igual el peso que haya cogido porque ha ganado mucho en salud. Mostró su lado más íntimo. Y el más sensible. Destacamos algunas de sus confesiones…

“Cuando murió mi madre se desmoronó todo. Si de una casa quitas el pilar… todo se cae”.

“Mi padre, el pobre, procuró lidiar con todo. A su manera. Estaba con sus tratamientos y me daba miedo que se tomara las pastillas equivocadas. Yo creía que no iba a durar ni un año y al final duro ocho”.

“Ya luego vinieron los tecnicismos, todo lo que vino después del tema gordo de la herencia. Sé cabrearon unos con otros. Pero lo bonito fue que todo se arregló”.

“No he querido leer el libro que escribió mi padre. Porque me cogió en un momento delicado y me daba mucha penita. A ver si lo leo ahora ya con más serenidad”.

“Sueño mucho con mis padres. Y coinciden cuando tengo que tomar decisiones importantes. Yo ahora regaño a la gente que no aprovecha el momento de sus padres”.

“Mi madre no tuvo rivalidad con nadie. Se llevaba bien con todas las artistas”.

"Cuando murió mi madre se desmoronó todo"