El partido disputado el pasado sábado entre el CW Jerez y el CW Sevilla, pasará a la historia del club jerezano como uno de los más emocionantes vividos en la Piscina Arquitecto José Laguillo. Los jugadores dirigidos por Manuel Aguilar, lograron remontar cinco goles en contra, a base de mucho esfuerzo y sin dejar de pensar en que podían conseguirlo. Sólo quien sueña con lo imposible logra hacerlo posible.
El encuentro comenzó con el equipo local muy enchufado, haciendo un pressing muy fuerte en toda la piscina, intentando de esta forma no dejar pensar a los hispalenses, para que el juego fuera rápido y se produjeran el máximo de situaciones de ataques en las dos porterías, algo arriesgado, pero necesario para poder conseguir la remontada.
Primeros cuartos marcados por las expulsiones
Los dos primeros cuartos se caracterizaron por la cantidad de expulsiones que tuvieron que señalar los colegiados, siete en contra del CW Jerez y tres en contra del CW Sevilla. También se señalaron dos penaltis a favor de los visitantes y uno a favor de los locales. La apuesta le salió bien a los jerezanos pues lograron materializar dos goles, uno de contraataque y otro de penalti.
Por el contrario los hispalenses sólo consiguieron marcar un gol en situación de uno de más, fallando los dos lanzamientos de penaltis, por lo que el partido llegó al final del segundo cuarto con dos goles a uno (2-1) a favor del CW Jerez.
El tercer cuarto transcurrió como los dos primeros, pero con la diferencia de que los dos equipos estuvieron mucho más acertados de cara al gol. A la mitad del periodo el marcador señalaba un empate a cuatro goles (4-4) que empezaba a preocupar a los locales, y fue a partir de ese momento cuando los de Manuel Aguilar apretaron aún más, tanto en defensa como en ataque, logrando marcar tres goles seguidos que lo auparon a un esperanzador (7-4) a falta de un minuto y medio para finalizar el cuarto.
Pero en la siguiente jugada los hispalenses aprovecharon una doble expulsión de los locales para recortar distancias, acabando el tercer parcial con el resultado de (7-5) favorable al CW Jerez.
El último cuarto comenzó con un buen gol del local Rubén Muñoz, que ponía de nuevo tres arriba a los naranjas (8-5). En la siguiente jugada los visitantes dispusieron de una nueva doble superioridad numérica que no supieron aprovechar. A falta de cinco minutos para el final del partido, el sevillano Pedro Castilla, anotó un gol desde el arco recortando la ventaja de los locales a sólo dos goles (8-6).
Vuelta a la eliminatoria
Pero los jerezanos aún creían en sus posibilidades y a partir de este gol en contra empezaron a defender su portería de una forma excepcional, con un pressing en todo el campo que atenazó a los jugadores hispalenses, los cuales las pocas veces que lograron chutar, se encontraron con el portero local Jaime Carrasco, que estuvo impecable todo el partido.
Los jugadores jerezanos, conscientes de que tenían que anotar cuatro goles en cinco minutos, cada vez que recuperaban el balón en defensa salían en bloque al contraataque, siendo Mario Carrasco con dos goles y Manuel Vargas con otros dos, los que lograron poner al equipo jerezano con seis goles de ventaja, que le daban la vuelta a la eliminatoria y clasificaba al CW Jerez para disputar la gran final (12-6).
