El Real Madrid sigue con paso firme sus aspiraciones por seguir peleando por LaLiga. Los de Zinedine Zidane tenían la obligación de vencer a la SD Eibar en la tarde de este sábado 3 de abril, antes de afrontar una semana clave con dos partidos que marcarán la temporada del conjunto madridista.
Para la ocasión, el técnico francés decidió utilizar una formación con tres centrales y dio entrada a varios futbolistas no habituales en las últimas jornadas, como Militao, Marcelo, Asensio o Isco. Unos cambios que han dado resultado a Zidane, después de lo visto sobre el terreno de juego.
Durante la primera mitad el Real Madrid fue muy superior al conjunto armero, que consiguió inquietar a Thibaut Courtois en los primeros compases del encuentro. Sin embargo, con el paso de los minutos el equipo blanco lograba hacerse con el dominio total del juego.
Así, los pupilos de Zinedine Zidane conseguían generar peligro con bastante facilidad sobre la portería de Marko Dmtrovic. Hasta dos goles anuló el colegiado al Real Madrid durante los primeros 45 minutos. El primero a Marco Asensio, que batió al guardameta serbio con un magnífico taconazo; y el segundo a Karin Benzema, que encontró portería con un buen cabezazo. Ambos goles fueron invalidados por fuera de juego.
Sin embargo, antes del descanso el Real Madrid encontró el premio a la insistencia. Gran pase de Casemiro a Asensio, que con el control ya consiguió defenderse de su defensor para quedarse mano a mano con Dmtrovic, al que batió con gran calidad al palo largo. Así, se llegaba al descanso con 1-0 en el marcador a favor del conjunto madridista.
Tormenta y sentencia del Real Madrid en el segundo periodo
Tras la reanudación daba la sensación de que el equipo blanco había dejado escapar con vida al Eibar, ya que la renta podría haber sido mayor. Y al final, por momentos, el Real Madrid terminó sufriendo para mantener los tres puntos en su casillero.
En los primeros minutos de la segunda mitad, Marco Asensio, uno de los más entonados durante el partido, estrelló un gran disparo al larguero de la portería eibarresa. Volvía a personar el conjunto de Zidane y el partido daría un giro inesperado a causa del tiempo.
De un momento a otro se desató una tormenta en Madrid. La lluvia y el viento hicieron acto de presencia en el estadio Alfredo Di Stéfano, dando la sensación de que el partido se podía complicar para los intereses de la escuadra madridista.
Y así fue, porque a causa del viento, a punto estuvo el Real Madrid de introducirse un balón en su propia portería, aunque Thibaut Courtois corrió lo suficiente para despejar el balón a córner con la puntera de la bota.
Posteriormente llegaban los primeros cambios de Zidane, con la mente puesta en la ida de los cuartos de final de la Champions; ya que los blanco deben medirse al Liverpool el próximo martes 7 de abril. Modric y Asensio se retiraban del terreno de juego y saltaban al campo Toni Kroos y Rodrygo. Minutos más tardes les tocaría el turno a Arribas y Vinicius, que ingresaron al verde en lugar de Isco y Marcelo.
En el minuto 71' el colegiado volvía anular un gol al Real Madrid. En esta ocasión a Casemiro, por fuera de juego de Arribas en el comienzo de la jugada. Sin embargo, prácticamente en la siguiente jugada Benzema sentenciaba el encuentro con el 2-0 tras un gran pase de Vinicius.
Tres puntos de confianza
Al final, el Real Madrid consiguió una victoria vital en sus aspiraciones por LaLiga y refuerza la confianza del equipo antes de una semana clave de la temporada. El martes 7 de abril los blancos se miden al Liverpool de Jürgen Kloop en los Cuartos de Final de la Champions League.
Tras ello, el próximo sábado tendrá lugar el clásico frente al FC Barcelona en el Alfredo Di Stéfano. En apenas siete días, los de Zinedine Zidane se juegan su futuro en la Champions League y las opciones reales de seguir peleando el título de Liga 2020-2021.
