El Sevilla FC no pudo pasar del empate ante la Real Sociedad (0-0) en un partido en el que los hispalenses pagaron el desgaste provocado por el duelo ante el West Ham en la Europa League. Los de Julen Lopetegui llegaron al duelo con la esperanza de olvidar el duro trago europeo con una victoria en LaLiga que impulsase sus aspiraciones de seguir en la pelea del campeonato. Sin embargo, la Real Sociedad truncó estos planes y bien pudo haberse llevado un premio mucho mayor tras los disparos al poste de Portu y David Silva, que perdonaron la vida a un Sevilla que no llegó a encontrarse en todo el partido.
Levantarte después de un fracaso es una obligación para un Sevilla FC que se ha ganado a pulso el estatus de club de élite. La dolorosa eliminación ante el West Ham de la Europa League ha sentado como un jarro de agua fría en Nervión, que se autoimponía la exigencia de hacer un buen papel en su competición fetiche, pero que se dio de bruces con la realidad de una competición en la que no se perdonan los errores.
Para curar las heridas, el Sevilla volvía a la competición doméstica con el objetivo de seguir sellando la clasificación para la Champions League de cara a la próxima temporada. Julen Lopetegui tuvo que hacer encaje de bolillos con el once inicial debido a las bajas, a las que se sumo la de Bono en el calentamiento del partido.
Sorloth se topó con Portu en el inicio del partido
Durante la primera media hora, la Real Sociedad se encontró como en casa en la apática tarde de lluvia que tenía lugar en el Pizjuán. Pese a que los locales llevaban la batuta del partido, el conjunto donostiarra a punto estuvo de encontrar la ventaja en el marcador. Sin embargo, el Sevilla encontró en Portu su mejor aliado, pues el tiro de Sorloth topó en el delantero cuando ya entraba en la portería de Dimitrovic.
En un encuentro de poder a poder, Sevilla y Real no pudieron despegarse al descanso. La igualdad fue la nota dominante de un primer tiempo en la que al Sevilla le faltó frescura en la medular y desparpajo en zonas ofensivas, por lo que Lopetegui no tardaría en tomar medidas para lanzarse por el partido.
La Real Sociedad se hizo dueña del partido
Y así fue, Lopetegui decidió retirar a Munir para dar entrada a Joan Jordán y reforzar el centro del campo. Por su parte, Imanol Alguacil no quiso correr riesgos y retiró a Zaldua, con tarjeta, para que entrase en su lugar Gorosabel.
La primera llegada importante del segundo capítulo corrió cargo de Jesús Navas, que puso un caramelo a Martial, pero que fue salvado 'in extremis' por la defensa visitante.
Pese al ligero dominio local, la Real Sociedad iba a volver a tener dos claras oportunidades para ponerse por delante en el marcador en dos ocasiones. En la primera, Portu estrelló el balón en el poste con un gran cabezazo, y a la siguiente jugada, David Silva a punto estuvo castigar al Sevilla en los momentos en los que parecía que se tambaleaba el equipo.
A falta de 20 minutos, la Real siguió apretando el acelerador y tuvo contra las cuerdas un buen rato a los de Nervión. Sería el poste el que volvería a salvar al Sevilla. David Silva peinó con delicadeza un balón que terminó estrellado en el larguero. El Sevilla se salvaba, el Pizjuán se impacientaba y el partido iba llegando a su final con el marcador inicial.
Reparto de puntos en el Pizjuán
Y es que el monólogo visitante durante parte de la segunda mitad era total, que seguía perdonando la vida a un Sevilla que estaba hecho un flan y que respondió con un peligroso tiro de Lamela, que volvía a jugar en el Pizjuán después de su lesión de larga duración.
Pero no estuvo el día para el Sevilla, que aunque logró revertir la situación en los últimos minutos, no llegó a encontrar el gol y vio como la Real Sociedad le impidió resarcirse de las heridas provocadas por la Europa League, y ya le obliga a fijar en rojo el partido ante el FC Barcelona al Camp Nou justo después del parón, que medirá realmente las aspiraciones en LaLiga del equipo hispalense.
