Los frutos secos son un grupo de alimentos que aportan muchos beneficios al organismo, por lo que se recomienda incorporarlos a la dieta de forma regular, sin embargo, antes de hacerlo es necesario conocer un poco más sobre ellos y establecer esos pequeños limites que, de ser transgredidos, pueden acarrear consecuencias negativas; algo que saben muy bien en supermercados como Carrefour en Jerez de la Frontera y en el resto de España.
Sin duda, aunque lo podemos encontrar en gran numero de tiendas de alimentación y supermercados, en esta cadena francesa, los frutos secos se venden como rosquillas. Si bien, el precio puede variar según en el Carrefour de España que te encuentres, en el de Jerez podemos encontrar por ejemplo el cóctel de frutos secos extra en su tarrina de 250 gramos está a un precio de 3,99 Euros: la bolsa de pistachos de 300 gramos igualmente a 3,99 Euros, y si vamos a lo grande, el Cocktail de frutos secos San Blas de 2 kilos está a 6,25 Euros.
Características y propiedades de los frutos secos
Antes de pasar a explicar la razón por la que nunca debes pelar los frutos secos, es necesario que comentemos un poco acerca de las características y propiedades de este nutritivo grupo alimenticio y de los beneficios que aportan a la salud, de esta manera, será todo mucho más comprensible y tomarás conciencia de lo que comentaré más adelante.
Características
Existe una extensa variedad de frutos secos, que se caracterizan principalmente por ser semillas con una composición que abarca menos del 50% de agua (de allí el origen de su denominación) y que poseen una gran cantidad de grasa, siendo recomendados para aportar energía y vitalidad al organismo.
Son una buena fuente de fibra, de proteínas, de vitaminas y de minerales como el calcio, además, tienen propiedades antioxidantes que ayudan a eliminar todas esas toxinas que el cuerpo no debe almacenar de ninguna manera.
Gran parte de esas propiedades del fruto, o propiamente hablando: de la semilla, se encuentran en esa fina piel que recubre su parte interior, y que al consumirla de forma regular aporta muchos nutrientes al cuerpo.
Las organizaciones de salud de reconocimiento mundial aseguran que lo más recomendable es comer, por lo menos, un puñado (o 50 gramos) al día de algún fruto seco o de variedad de ellos, siendo los más conocidos y beneficiosos: la almendra, los pistachos, la avellana, la nuez, el maní, etc.
Beneficios
En este orden de ideas, los frutos secos ayudan a controlar la ansiedad, eliminando las probabilidades de sufrir de obesidad debido al consumo de grandes cantidades de comida.
También son ideales para regular el proceso digestivo, porque cuentan con un alto porcentaje de fibra. Aportan energía y vitalidad por su contenido proteico, y le dan sabor a los alimentos dulces.
Son conocidos como una fuente de grasa sana o saludable, de modo que ayudan a controlar los niveles de colesterol en la sangre. Además, son una buena fuente de calcio, por lo que ayudan a evitar enfermedades óseas.
Y como estos, son muchos más los beneficios que se obtienen de consumir frutos secos, especialmente manteniendo la piel, por lo que resulta muy importante saber cómo deben comerse cada uno de ellos.
¿Cómo se deben comer los frutos secos?
Ahora bien, vistos los beneficios que se obtienen al consumir frutos secos, y sabiendo que gran parte de sus nutrientes se encuentra en la piel externa que sueles quitar, es hora de comenzar a comprender cómo se deben comer realmente estos alimentos y cambiar hábitos y paradigmas:
En el caso de las avellanas y de las almendras
Lo más común es ingerirlas con piel, sin embargo, existen personas que suelen pelarlas, lo que se debe evitar en gran medida, porque en esta fina capa se encuentra la mayor cantidad de vitaminas, fibra y de calcio, por lo que ayudan a proteger el sistema inmunológico, a regular el proceso digestivo, a fortalecer los huesos, etc.
Lavarlas muy bien, dejar secar y consumir directamente es lo más conveniente, y de esta manera deben también incorporarse a otros alimentos.
Son de los frutos secos más nobles, porque en ellas los beneficios se duplican, de allí que sean las más utilizadas para la fabricación de harinas especiales.
En el caso de los maníes o cacahuetes
Son de los más populares entre los frutos secos, básicamente porque son los más accesibles, pero es necesario estar atento a posibles reacciones de alergia.
Este fruto se recomienda especialmente para aumentar de peso y ganar masa muscular, siempre que se combine con una buena rutina de ejercicios, para evitar la acumulación de grasa excesiva y la ganancia de peso indeseada.
Es mucho más importante recalcar en este caso la medida de conservar la piel, porque son los frutos secos que con mayor frecuencia se pelan, principalmente porque la capa de piel que los recubre es un poco más viscosa y a la mayoría de las personas no les agrada su sabor. Sin embargo, en la misma se encuentran, básicamente, todos los nutrientes de la semilla.
En este punto es importante diferenciar entre la piel y la cáscara, puesto que el maní, a diferencia de las avellanas y de las almendras, tiene ambas, recalcando entonces la necesidad de mantener la piel, más no la cáscara.
En cuanto a los pistachos
Suelen ser los consentidos, porque son los que menos calorías aportan al organismo y, por ende, los que menos hacen engordar.
En cuanto a la piel, realmente se trata del mismo caso, con este o con cualquier otro fruto seco debes conservarla para garantizar que las propiedades del fruto se mantengan intactas.
Ahora bien, es obvio que la piel del pistacho es muy difícil de ingerir, por su característica más dura y áspera. En este sentido, si definitivamente no toleras consumirlos con piel, lo mejor es procesar el alimento y obtener una harina que puede ser utilizada para la elaboración de helados, cremas, dulces, etc., sin embargo, en estos casos es importante cuidar los aditivos incorporados a la preparación.
Es importante mantener el consumo de frutos secos
Finalmente, es importante dejar por sentado que consumir frutos secos es un buen habito que puede cambiar nuestras vidas, haciéndolas más sencillas y saludables, evitando enfermedades y permitiendo un mejor desarrollo generalizado, por lo que mantenerlo en el tiempo y sin exagerar con las cantidades recomendadas, es lo más adecuado.
Se trata de alimentos nutritivos y llenos de propiedades beneficiosas para la salud, y este es el motivo por el que nunca debes pelar los frutos secos, porque son, por completo, semillas nobles de las que puedes sacar mucho provecho y, además, son riquísimos.