Parecía que el Coronavirus nos volvería mejores, pero lo único cierto es que está resultando casi todo lo contrario. El último ejemplo lo encontramos en Jaén, donde una discusión por un aparcamiento ha terminado con un desenlace impactante.
Hasta el punto de que el altercado en cuestión acabó en los tribunales y ahora, por fin, ha tenido resolución. La Audiencia Provincial de Jaén ha condenado a un hombre, de 65 años, a tres años y nueve meses de cárcel por intentar matar con un cuchillo de cocina a su vecino con el que mantenía una relación de enemistad motivada por un problema con un aparcamiento cercano.
De esta manera, la resolución a la que ha tenido acceso este medio, le condena a dos años y seis meses de cárcel por un delito de homicidio intentado y otros 15 meses de cárcel por un delito continuado de amenazas. Por un delito de lesiones deberá pagar 90 euros.
Reconocimiento de los hechos
En el transcurso de la vista, el acusado ha reconocido los hechos y se ha declarado culpable ante el tribunal, además de mostrarse conforme con las penas solicitadas por el Ministerio Fiscal, que inicialmente reclamaba ocho años de prisión, pero que lo ha rebajado hasta los tres años y nueve meses tras un acuerdo entre las partes.
Su mala relación provocó distintos incidentes en los que el procesado profirió amenazas tanto a su vecino como a los dos hijos de éste. El acusado ha reconocido que en la calle San Pablo, en Jaén capital, comenzó a proferir amenazas de muerte contra su vecino.
Tras la llegada de los hijos para proteger a su padre, el procesado "extrajo un cuchillo de cocina del que se había provisto previamente y que llevaba oculto entre sus ropas y le atacó". Asimismo hirió a uno de los hijos de su vecino causándole una herida en región torácica derecha, de un centímetro de profundidad, pero sin consecuencias graves.
Igualmente, se le imponen nueve años de prohibición de acercarse y comunicarse con los afectados. Finalmente, hay que añadir que en concepto de responsabilidad civil deberá abonar un montante total de 5.227 euros por las lesiones y las secuelas causadas.
