Varias generaciones de jerezanos no podrán olvidar nunca el nombre de 'Buba'. Este nombre ha estado estrechamente vinculado al Zoobotánico de Jerez de la Frontera hasta que en el año 2011 esta elefanta abandonaba las instalaciones para vivir sus últimos años de vida en el zoo húngaro de Sosto hasta que este miércoles 29 de marzo se ha confirmado su fallecimiento.
Este ejemplar llegó a Jerez el 11 de marzo de 1988, procedente del Parque Nacional de Etosha en Namibia (África) y su nombre se popularizó pronto entre los visitantes que cada día acudían a este parque para contemplar la amplia variedad de especies que conserva y protege.
Durante más de 20 años pudo disfrutar del cariño y la simpatía de miles de personas y de manera muy especial de los cuidadores que a diario velaban por su cuidado y atención.
La llegada de Buba supuso todo un reclamo para el Zoobotánico de Jerez y es que no hay que olvidar que esta especie, una de las más grandes del mundo, necesitan de mucho espacio para vivir. El proyecto no fue fácil y hubo que pedir ayuda a muchas empresas de la ciudad, que se volcaron con este sueño y, colaboraron para traer al parque, por primera vez en su historia, a un elefante africano.
A su llegada, se abrió un concurso donde los niños y niñas de la ciudad le bautizaron con el nombre de Buba. Miles de anécdotas, desde entonces, quedaron grabadas en la retinas de cuantos la conocieron hasta que le llegó la hora de ser madre.
Trasladado de Buba de Jerez a Hungría
Este fue el motivo por el que se trasladó a Hungría, donde se unió a un grupo reproductor, siguiendo las directrices del coordinador de la especie. Inicialmente se preservó la idea de que pudiera afrontarse una remodelación de la instalación para albergar a un grupo de elefantes y una vez construido pudiera volver al Zoo, aunque desafortunadamente ese momento no podrá vivirse.
En el viaje a Hungría, Buba estuvo acompañada, en todo momento, por un cuidador del Zoo, Juan Caballero, que hizo con ella un largo viaje y no volvió hasta dejarla instalada y bien atendida. Buba por ser la más longeva del grupo (35 años), se convirtió en la líder de la pequeña manada en Sóstó Zoo, Hungría.
En 2016, una expedición de trabajadores del Zoo de Jerez acudieron a al zoo de Sóstó, a 300 Kilómetros de la capital, para visitarla donde pudieron comprobar de primera mano cómo era su día a día onviviendo con otra hembra y una cría que parecía suya.
🐘Comenzamos la mañana con una noticia que estamos seguros que a más de uno le generará nostalgia y hasta cierta tristeza ⤵️
— Ayuntamiento de Jerez (@ciudadjerez) March 29, 2023
➡️Ha fallecido nuestra elefanta Buba que desde 2011 se encontraba en el zoo húngaro de Sosto
En el @ZooJerez la recordamos también con mucho cariño pic.twitter.com/kN87DvDurY
Finalmente, a primera hora de la mañana, desde el perfil oficial del Zoobotánico de Jerez, han confirmado la triste noticia de su fallecimiento: "Comenzamos la mañana con una noticia que estamos seguros que a más de uno le generará nostalgia y hasta cierta tristeza Ha fallecido nuestra elefanta Buba que desde 2011 se encontraba en el zoo húngaro de Sosto En el Zoobotánico de Jerez la recordamos también con mucho cariño", escribían.
