jueves. 28.03.2024
José Luís Ábalos (PSOE), Pablo Casado (PP) y Santiago Abascal (Vox) | El MIRA
José Luis Ábalos (PSOE), Pablo Casado (PP) y Santiago Abascal (Vox) | El MIRA

José Luis Ábalos, ministro de Transportes, ha advertido este domingo, al igual que hizo el sábado Pedro Sánchez, de que "Madrid puede convertirse en la primera región de Europa gobernada por la ultraderecha". El ministro ha remarcado que "PP y Vox son ya indisociables", es decir, considera que los populares están a la altura del "extremismo" de Vox.

En un encuentro de apoyo al candidato socialista a la presidencia de la Comunidad de Madrid, Ángel Gabilondo, Ábalos ha criticado la formación de un gobierno PP-Vox en Madrid, y para reafirmarlo ha lanzado una pregunta retórica: "¿Quién es la candidata de la ultraderecha en Madrid?". "Votar al PP es votar a Vox. Están en el mismo monte", se ha respondido.

De esta manera, el valenciano reivindica el Madrid tradicional de acogida. "Esta Comunidad de Madrid no se merece este tipo de populismo que declara enemigos de la patria como quien hace la lista de la compra: socialistas, comunistas, inmigrantes, mujeres, ecologistas... ", recalcaba. 

Además, durante el acto, Ábalos ha aprovechado para resumir y adelantar sus políticas al frente de la cartera relacionada con el derecho a la vivienda digna en el Gobierno de Pedro Sánchez, en cuyo centro ha colocado "la gente, las familias a las que les sobra mes para poder llegar al final del sueldo".

El PSOE ha elegido el tema de la vivienda como el primer contenido de los actos temático sectoriales por los que se paseará Ángel Gabilondo como candidato de Madrid. Por ello, el ministro ha defendido la ley de vivienda que prepara el gobierno, "primera en 40 años de democracia".

 Así ha salido al paso de las críticas de dirigentes de Podemos formuladas durante la semana pasada:  "No somos aliados de los fondos inmobiliarios ni del gran capital, como algunos deslizan intentando ponernos en el lado de los malos".

La promesa de Gabilondo para frenar a PP y Vox

En este sentido, el PSOE madrileño ha dejado abierta la posibilidad de pactar con partidos de izquierda y derecha en las elecciones del 4 de mayo. Si bien, este próximo sábado abrirá esa puerta Pedro Sánchez durante la presentación de la candidatura de Ángel Gabilondo a la presidencia de la Comunidad de Madrid.

Pedro Sánchez y Ángel Gabilondo | Foto de Europa Press

"Nos presentamos como una opción de izquierdas, centrada, no de centro. No somos una opción de centro, somos una opción de izquierdas. Si estamos centrados es porque podemos y queremos incorporar abiertamente, con una mano y otra, a todos los que quieran participar en este proyecto de mayorías", ha expuesto el candidato socialista.

Ángel Gabilondo se ha mostrado muy crítico con las experiencias de Madrid en política de vivienda bajo los gobiernos del PP, recordando "la venta de 2.935 viviendas públicas por parte del Gobierno de Ignacio González a un fondo de los llamados buitres por 210 millones de euros".

"El PP pretende hacer prevalecer intereses particulares sobre los intereses comunes"

Así el candidato socialista ha recordado aquella venta como demostración que  "para ellos la vivienda es un activo financiero con el que hacer grandes negocios con los fondos de inversión", ha dicho. Y ha acusado al PP de que "pretende hacer prevalecer intereses particulares sobre los intereses comunes", con el resultado de que "la emergencia habitacional es una realidad que se ha ido agudizando con el paso del tiempo, y la Comunidad de Madrid es puntera en esta tensión".

Para terminar, Gabilondo ha prometido que un Gobierno presidido por PSOE, en vez de lo que pretenden Vox y PP, permitirá iniciar la construcción "de más de 15,000 viviendas para el alquiler social", con el objetivo de terminar con un problema histórico de la política madrileña y que ha achacado a la actual presidenta del PP, Isabel Díaz Ayuso: "Viviendas para alquiler de jóvenes con precios al mes es de 1000 cuando el salario mínimo está en 950 euros. Resulta increíble".

Ábalos pone al PP en el mismo nivel de extremismo de Vox