viernes. 26.04.2024
Pere Aragonés y Pedro Sánchez | El Mira
Pere Aragonés y Pedro Sánchez | El Mira

La conformación de un nuevo Gobierno en Cataluña y el nombramiento de Pere Aragonés como presidente de la Generalitat abre un nuevo marco político en el país. Así, ya se empiezan a observar algunos movimientos en el seno del Gobierno central.

Entre ellos, destaca la idea de Pedro Sánchez de conceder indultos a los políticos presos independentistas condenados por el procés. Una intención que cuenta con el rechazo del Tribunal Supremo y otros partidos político, como Vox, PP o Cs.

Así, este miércoles 27 de mayo, el nuevo presidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonés, ha planteado aprovechar los dos años de legislatura que le restan a Pedro Sánchez "para presionarlo" y convencerlo para la celebración de un nuevo referéndum en Cataluña.

Durante una entrevista de TV3 recogida por elMIRA.es, el nuevo jefe del Ejecutivo catalán ha concluido que es necesario que el independentismo se una para aprovechar un panorama político en el Estado con una "derecha españolista y la ultraderecha movilizada en la calle y en los juzgados"; e internacional, con un posible referéndum en Escocia.

"Ante la derecha española y el fascismo, los demócratas españoles tienen que ver que, si quieren salir adelante, tienen que ir de la mano del independentismo catalán y que solo con democracia --con el referéndum-- podemos resolver el conflicto político", ha zanjado.

Aragonès ha insistido en que hay que aprovechar esta ventana de dos años para exhibir ante la comunidad internacional la voluntad del independentismo de dialogar con el Estado; ya que cree que a partir de entonces puede haber otra mayoría y un Gobierno diferente en España que se oponga a la negociación.

"Si el Estado español de aquí a dos años se levanta de la mesa, nosotros podríamos seguir avanzando como siempre hemos hecho, democrática y pacíficamente", señala Aragonés.

Diálogo para volver a plantear el referéndum de autodeterminación

Ha recalcado la necesidad de apostar por el diálogo planteando la autodeterminación y la amnistía como las únicas soluciones posibles para resolver el conflicto, y ha razonado que esto lo harán desde el Acuerdo Nacional por la Autodeterminación y la Amnistía que quiere convocar: "No será una propuesta únicamente mía como presidente ni una propuesta del Govern. Debe ser una propuesta del país".

Sin embargo, ha admitido que es escéptico con los resultados que pueda dar la mesa de diálogo en los próximos dos años: "No quiero engañar a nadie. No diré que esto con dos años lo tenemos resuelto".

"Pero sí que podemos trabajar para plasmar la agenda política aquí, poner al Estado ante esta disyuntiva y que tengan muy claro que la resolución del conflicto político en Catalunya solo pasará si se acaba acordando un referéndum. El resto es la derrota de Catalunya o continuar con la represión 'sine die'. Y la sociedad catalana no estamos dispuestos a ser derrotados ni a soportar la represión 'sine die", ha argumentado.

Sobre qué hará en caso de que la propuesta de amnistía y de conseguir para Catalunya un referéndum de autodeterminación no prospere, ha dicho que el siguiente paso se decidirá "de forma consensuada" con los diversos actores del independentismo y teniendo en cuenta las condiciones que haya en ese momento.

Además, preguntado por cómo ve la posibilidad de que el Gobierno central decrete el indulto a los presos del 1-O, ha insistido en que "no se opondrá" a medidas que puedan aliviar la situación de los dirigentes independentistas, aunque ha subrayado que la solución que el nuevo Govern ve para superar el conflicto político es la amnistía.

Aragonés pretende presionar a Sánchez para convocar un nuevo referéndum