La debacle de Ciudadanos en las elecciones a la presidencia de la Junta de Andalucía ha encendido todas las alarmas en el seno del partido, que ha pasado de ocupar la vicepresidencia a quedarse fuera del parlamento andaluz. La crisis en la que se encuentra sumido el partido naranja provocó primero la salida de Albert Rivera y ahora la de Juan Marín. Por todo ello, la presidenta del partido, Inés Arrimadas, natural de Jerez de la Frontera, ha anunciado una 'refundación'.
Desde el partido se pretende afrontar esta dura realidad en la que en apenas unos años, Cs ha pasado de ser una alternativa real a PP y PSOE a convertirse en un partido más, sin representación ya en la comunidad autónoma más grande de Andalucía.
De este modo, la formación apuesta por una profunda reestructuración que esperan sea "refrendada" por los militantes antes de las elecciones autonómicas y municipales previstas para mayo de 2023.
Inés Arrimadas, que fue madre por segunda vez el pasado mes de marzo, ha puesto el ejemplo de los cambios desarrollados por los partidos liberales europeos que también han pasado por "momentos durísimos" y que tiempo después han salido a flote, entre los que ha destacado al partido liberal alemán.
"Estoy muy triste hoy. Es verdad que en días como este hay que hacer de tripas corazón y dar la cara. Hay que hablar con todo el mundo, escuchar y saber que hay que seguir luchando", ha asegurado en varias entrevistas concedidas en la mañana de este martes 21 de junio.
El plan de Ciudadanos
Arrimadas, que no ha querido olvidarse de los 120.000 andaluces que votaron a la formación 'naranja', ha reconocido algunos de los principales errores que han llevado a la deriva a su partido.
De igual forma, ha insistido en que quedan 11 meses por delante para trabajar en un plan de acción y presentarse a las municipales de la manera "más abierta posible" pese a reconocer que va a tener un coste personal "grande". "Hay que dar un paso al frente", ha finalizado.
