viernes. 29.03.2024

Se cumplen 100 años del nacimiento de Gila

El humorista logró sobrevivir a un fusilamiento de la Guerra Civil

Se trata de una efeméride para cubrirla de actos, de conmemoraciones, de remembranzas y de puesta en valor de un genio que fue, de un genio que se fue. Que se nos fue. Hablamos de Gila, del genial Gila, del humorista por antonomasia. 100 años de su nacimiento. Una oportunidad de oro para darle de nuevo el protagonismo de la primera plana. Nació en el madrileño barrio de Chamberí, el 12 de marzo de 1919. Siempre se le recordará pegado al teléfono. Al teléfono del escenario, al teléfono de la risa, al teléfono de la risa. Hasta que…

Hasta que una afección pulmonar acabó con su vida en 2001, a los 82 años, después de una vida marcada por la guerra y el trabajo. La de Miguel Gila fue una historia dura -muy dura, extremadamente dura a veces- que además desembocó en hacer reír a los demás, superando una de las pruebas más duras que ha pasado este país: la Guerra Civil. Superar la Guerra Civil es tener pasaporte para una existencia a prueba de bombas. Huérfano de padre, éste murió en un accidente en Barcelona dos meses antes de nacer él; luego su madre volvió a casarse. Gila estudió en el colegio religioso "Raimundo Lulio", pero las dificultades económicas familiares le obligaron a abandonar los estudios a los trece años.

Tenía 17 años cuando comenzó la Guerra Civil. Militante de las Juventudes Socialistas, intervino en la contienda desde julio de 1936 como voluntario en el Quinto Regimiento de Lister. Estuvo en Sigüenza, Somosierra, en los frentes de Madrid, Guadalajara y Ebro, y, finalmente, en Extremadura. En Valsequilla (Córdoba) fue puesto frente a un pelotón de ejecución y logró salvar la vida. El fusilamiento se produjo al anochecer de un día lluvioso y los integrantes del piquete estaban borrachos, por lo que no le acertaron los disparos. Gila se hizo el muerto y logró sobrevivir. Poco después, en diciembre de 1938, fue hecho prisionero e internado hasta mayo de 1939 en un campo de prisioneros.

Pasó por los penales de Yeserías, Carabanchel y Torrijos, y a continuación cumplió un servicio militar de cuatro años. Se inició en el periodismo en el diario Imperio de Zamora y en Radio Zamora, donde retransmitía partidos de fútbol. Descubrió sus facultades humorísticas en 1942 estando en Torrijos, cuando publicó sus dos primeras historietas en la revista Flechas y Pelayos. Ese mismo año inició sus colaboraciones en La Codorniz que duraron hasta 1951, primero bajo el seudónimo de "XIII" y más tarde como "Gila". El 8 de octubre de 1951 se convirtió en humorista hablado al leer en el teatro Fontalba de Madrid un monólogo creado en un principio para Antonio Casal y que al final tuvo que leer él, por encontrarlo el actor fuera de su línea habitual.

Luego vino la eclosión de una fecunda vida profesional. Trabajó en televisión, en teatro, en escenarios de toda España, en revistas de humor, en prensa. Hizo de todo y todo lo hizo muy bien: siempre dentro del campo y del ámbito del humor. Consiguió provocar la risa de propios y extraños. Jamás le faltaría contratos. En 2000 publicó un disco de ocho monólogos titulado 50 años de humor. Miguel Gila falleció la madrugada del 13 de julio de 2001 en la clínica Teknon de Barcelona, a causa de una insuficiencia respiratoria derivada de la enfermedad pulmonar que padecía. Divorciado de su primera esposa, una maestra de Zamora, en 1961 Miguel Gila se unió a la directora de teatro María Dolores Cobo, con la que contrajo matrimonio en el consulado de España en Buenos Aires el 17 de diciembre de 1982. La pareja tuvo una hija, Malena Isabel, nacida en 1979. Estos 100 años merecen de nuevo la ovación de un país entero.

Se cumplen 100 años del nacimiento de Gila