martes. 16.04.2024
Parkinson
Manos de una persona que padece Parkinson

La diabetes mellitus tipo 2 (DM2) se asocia con un mayor riesgo de enfermedad de Parkinson (EP), así como con una progresión más rápida de esta, según una revisión publicada en Movement Disorders. Ambas son enfermedades prevalentes que afectan a una población que envejece. La evidencia emergente sugiere relaciones biológicas entre los dos. Ambos se caracterizan por una acumulación aberrante de proteínas, disfunción lisosómica y mitocondrial e inflamación sistémica crónica. La resistencia a la insulina es un sello distintivo de la diabetes tipo 2 y también puede ser un factor importante que contribuya a la EP.

Harneek Chohan, de la Universidad Queen Mary de Londres, y su grupo de investigación realizaron una revisión sistemática para identificar estudios que investigan la asociación de la diabetes tipo 2 con el riesgo y la progresión de Parkinson. Tras ello, se utilizaron datos resumidos derivados de estudios de asociación de todo el genoma para examinar los efectos causales de la predisposición genética hacia la DM2 sobre el riesgo y la progresión de la EP. 

Resultados

Las estimaciones del efecto combinado de los estudios de casos y controles sugieren que la diabetes tiene una asociación negativa con el riesgo de EP, mientras que los metanálisis que se centran en estudios de cohortes prospectivos sugieren un mayor riesgo de Parkinson en pacientes con diabetes. Es importante destacar que estos análisis incluyeron pacientes con diabetes, en general, en lugar de la diabetes tipo 2, en concreto, y no han considerado la DM2 efecto que tiene sobre la progresión de la EP.

La asociación entre T2DM y riesgo de EP tampoco se ha explorado a fondo utilizando métodos causales modernos. La aleatorización mendeliana (MR) es un método en epidemiología genética que se puede utilizar para hacer un seguimiento de las asociaciones observacionales en busca de evidencia de efectos causales verdaderos. 

Las variantes genéticas se distribuyen aleatoriamente al nacer; por lo tanto, los determinantes genéticos de una exposición no se ven afectados por la presencia del resultado. El estudio actual combina el metanálisis de datos observacionales con el de datos genéticos (MR) para evaluar el efecto que tiene la diabetes tipo 2 sobre el riesgo de desarrollar Parkinson y sobre la progresión motora y cognitiva en pacientes con EP.

Una mujer con diabetes

Discusión

En el presente estudio, los investigadores usaron metanálisis de datos genéticos y observacionales para investigar la función de la DM2 como determinante del riesgo y la progresión de la EP. Los resultados de los metanálisis de datos de observación y los análisis de RM fueron en general concordantes.

Ambos métodos mostraron evidencia de que la diabetes tipo 2 aumenta el riesgo de Parkinson en el futuro. Los resultados también muestran que la DM2 puede aumentar la tasa de progresión motora de la EP, con un apoyo más débil para un efecto sobre la progresión cognitiva.

El efecto de la diabetes tipo 2 sobre el riesgo de Parkinson fue más claro en los estudios prospectivos de la más alta calidad, que deberían verse menos afectados por el sesgo del observador y la selección. A diferencia de los metanálisis anteriores que consideraban la asociación entre la diabetes y la EP, se consideró específicamente la DM2 para el metanálisis de riesgo principal. 

"Cuando relajamos la definición de exposición para incluir todos los estudios de diabetes, se encontró una asociación nula entre la diabetes y el riesgo de EP. También observamos en ambos análisis de riesgo un fenómeno ahora reconocido de divergencia en las estimaciones de efectos agrupados por diseño de estudio, de modo que los estudios de casos y controles tienden a asociarse con un riesgo menor (incluso riesgo inverso) de EP y los estudios de cohortes con mayor riesgo de EP", concluyen los investigadores.

La relación de la diabetes tipo 2 con el riesgo de padecer Parkinson