viernes. 29.03.2024
Isabel II
La reina Isabel II

Muy fieles. Así son los empleados que trabajan para la reina Isabel II. Gracias a un programa televisivo de Reino Unido hemos podido conocer el ingenioso truco que los trabajadores de la Reina aplican para evitar que la monarca muera envenenada. Emily Andrews, corresponsal del ciclo, fue la encargada de desvelar los entretelones que suceden en pos de servirle la comida la soberana.

"Después de que todo esté servido, un paje elige al azar uno de los platos para servir a Su Majestad. Entonces, si alguien quisiera envenenar a la monarca, tendría que envenenar a todos", explicó la corresponsal. Además hemos podido saber que, cuando Isabel II no acude a grandes banquetes, su rutina nocturna es muy diferente.

A pesar de que la Reina tenga una gran selección de lujosos comedores, prefiere cenar en la comodidad de su propia sala de estar. "Ella tiene su cena en una bandeja mirando la televisión. A ella le gusta. Es hogareño, cálido y cómodo, afirmaba Lady Colin Campbell, experta real.

En Buckingham no falta el vino de Jerez de La Frontera

Isabel II no mete las manos en la mesa, prefiere contemplar las elaboraciones desde el otro lado y supervisar que todo marche bien en palacio. El chef hace los menús de tres días y eso nos da tiempo suficiente para obtener todos los productos y prepararlos. Cuando el menú llega a la Reina, ella tacha todos los platos que no quiere”, señaló el ex chef real Darren McGrady. "Usamos un repertorio de platos, principalmente comida británica y francesa". Además, reveló que a Isabel II no le gusta el ajo, limita la cantidad de cebollas en las preparaciones y prefiere alimentos que provienen directo de sus propiedades.

Lo que no falta en la despensa de la Reina es el vino de Jerez de la Frontera. Tan solo 816 empresas en el mundo pueden decir que son proveedores de alimentos en Buckingham. Del vino andaluz lo es Harveys, la marca premium de vinos de Jerez de Bodegas Fundador. Siendo la única marca española entre todos los proveedores en la Casa Real Británica. 

Cualquier momento es bueno para disfrutar de este vino. Una de sus características que lo hacen muy particular es su etiqueta inteligente, y es que gracias a ella el logotipo Harveys cambia de color blanco a azul y se puede saber cuando está a la temperatura perfecta para degustarlo, que son 10º centígrados. Tal es la devoción de la reina de Inglaterra hacia Jerez y sus caldos, que incluso puso el nombre de Sherry a uno de sus perros de raza corgi.

Recientemente la monarca lloraba la muerte de Fergus, uno de los últimos cachorros a los que Isabel II acogía semanas previas al fallecimiento del duque. Un cachorro de tan solo cinco meses en el que había encontrado el consuelo mientras paseaba por los terrenos del Castillo de Windsor, falleciendo de forma repentina. 

"La reina está absolutamente devastada", aseguraba el diario The Sun citando una fuente del Castillo de Windsor, residencia real situada a unos 50 kilómetros al oeste de Londres, donde vive la monarca, de 95 años, desde el inicio de la pandemia.

El truco que usan los empleados de la reina Isabel II para que no la envenenen