sábado. 01.04.2023
Isabel Pantoja
Isabel Pantoja

Ya habló por largo. Ya se vació. Ya dijo todo lo que tenía que decir. Ya se enfrentó a las cámaras de un modo más o menos seguro. Aunque con la mayor firmeza de criterios que se le recuerda. Hablamos de Kiko Rivera. Hablamos del hijo de Isabel Pantoja. Hablamos de quien quizá ahora no esté en la primera plana de los comentarios gracias a la docuserie de Rocío Carrasco ‘Rociíto’ (sobre su vida y obra , que en este caso no son amores precisamente).

Kiko Rivera, antaño su pequeño del alma, sorprendió  propios y extraños con sus declaraciones contra la actitud adoptada por su madre al respecto de asuntos económicos que le afectaban a él directamente. En efecto en ese serial de programas se puso de manifiesto que Cantora no dejaba de ser una herencia envenenada.

La irrupción de la familia Rivera

Las declaraciones de Kiko y los testimonios que vinieron en los programas subsiguientes no quedaron atrás. Y la irrupción de la familia Rivera a favor, al lado, junto a Kiko, con evidentes muestras audiovisuales, también fue caldo de cultivo para los comentarios, para los dimes y diretes, del procomún que pisa esta piel de el toro que se dio en llamar España.

Con Fancisco Rivera ‘Paquirri’, el torero de leyenda, en el epicentro del recuerdo, en los medios del ruedo de la nostalgia, pero también en la yerba quemada de la confrontación. Cuanto se ha removido y se está removiendo a este respecto es una desagradable forma de mantener encendido el nombre y apellido de uno de los mejores toreros de la Historia.
Guardando silencio

Isabel Pantoja guardaba y guarda silencio. Muchas personas incluso llegaron a preocuparse por ella. Por el ataque televisivo que algunas voces expertas incluso calificaron de linchamiento mediático. Linchamiento o no, sí es cierto que mediática fue la cosa. Con su natural y consiguiente subidón del índice de audiencia. Todo un círculo de concatenaciones planificadas al dedillo, milimétricamente.
Hay quienes estuvieron a favor del hijo dolido, del hijo doliente, y quienes por el contrario pensaron que tal cosa no podía hacérsele a una madre. Y que los trapos sucios en casa y con voz baja, sin pegada de multitudes. Los más dolidos: el grupo de fans de la tonadillera, el grupo más cercano queremos decir. Isabel Pantoja, por hache y por be, pero sobre todo porque es una artista grande a la que nadie puede discutir su valía, no deja indiferente a nadie.

Un duro golpe

De sobras es sabido que la artista no pasa por sus mejores momentos. Ni de lejos. Su situación personal y judicial no es buena en la actualidad. Si ya de por sí sus toma y daca con Loli -léase la quiosquera- es un hecho, y asimismo con Francisco y Cayetano Rivera… ahora podría entrar de nuevo en prisión. Con todo lo que ello supondría -¡un durísimo golpe!- para quien ya pasó por el trance de verse y saberse entre rejas.

Y es que la última -¿última?- querella presentada en el Juzgado de Marbella por el delito de insolvencia punible por la venta de La Pera no cabe duda de ninguna clase que, a no dudarlo, podría ser la más peligrosa, la más punzante, para la tonadillera porque directamente, y de un modo explícito, se dictan tres años de prisión y una multa de 18 meses con una cuota de 20 euros diarios… A ver en qué queda la cosa.

A Kiko Rivera, su hijo, se le ha preguntado por esta situación, por esta novedad sobre su madre, y el Dj ha preferido guardar monacal silencio. Estricto silencio. Mutis por el foro. No decir esta boca es mía. Labios sellados. No hacer la más mínima declaración a este tenor. Como tampoco se pronuncia sobre que actualmente esté paralizada la demanda de sus hermanos Francisco y Cayetano Rivera.

Isabel Pantoja podría entrar de nuevo en la cárcel: ¿Qué opina su hijo?