jueves. 25.04.2024
Spiriman
Spiriman

Adquirir un nivel de concienciación elevado nos permite muchas veces obrar verdaderos milagros. En el caso de Spiriman, el agua ha desempeñado una labor fundamental en el tratamiento de su cáncer. "En el agua me sentía flotar. Podía meditar. Mi cuerpo no pesaba", explica el médico granadino en uno de sus últimos vídeos.

Asimismo, la sensación de libertad le permitió "descubrir a Dios" y "sentir la energía que nos da el agua". Todo se mueve y esa es una razón fundamental para el tratamiento de enfermedades, pero sobre todo del cáncer. Y además, según detalla Jesús Candel, gracias a la Universidad de Granada van a poder contar con unas instalaciones para poder tratar también a niños. 

Recientemente, el médico granadino abrió un teaming para el proyecto y la unidad de Granda. Se trata de una plataforma a través de la que los interesados pueden donar un euro al mes y que se destina íntegramente al proyecto o la ONG a la que se dona. Con ello pretende conseguir financiación para proyectos pioneros a nivel mundial y la creación de unidad que, hasta la fecha no existía y que va a ser centro de formación

"Por muchos niños que también tienen cáncer, pero que también tienen muchas más probabilidades de supervivencia. Pero aquí les podemos transmitir mucho. El ejercicio físico transmite muchísimo al cuerpo. Es capaz de producir fenómenos fisiológicos que modifiquen el comportamiento de las células tumorales", explica Spiriman. 

Esta unidad, asegura, va a ser un referente de la sanidad pública a nivel internacional ya que podrá implantarse en el resto de hospitales de España. "Veo el fin al que quiero llegar y sé que va a pasar. Pero demos todos el primer paso". 

El poder del cáncer o el poder de curarlo

En su perfil de Facebook, Spiriman también ha publicado una profunda reflexión sobre este asunto. En una carta dice que "a menudo tenemos más fe en nuestros problemas que en nuestra capacidad de no tenerlos o resolverlos. Yo os tengo que decir que decidí vivir mi enfermedad conectándome a su sentido espiritual y fue allí, donde descubrí la verdad y la solución a la forma de afrontarlo, que era escuchando mi voz interior".

"Y me di cuenta que todo comenzaba por vaciar por completo mi mente de las cosas que tenía que hacer y eso me condujo al PERDÓN. Así lo estoy haciendo desde entonces. Desde el perdón y liberándome de la ira, la vergüenza, el odio o la venganza y creando una predisposición a la resolución de mis problemas", explica.

Por ello, Spiriman apuesta por devolver con amor el odio y el rencor que recibe, aprender a pedir perdón sin esperar nada a cambio y no te dejarse llevar por la envidia

Spiriman habla del milagro granaino al resto de España