Los padres de un bebé de tan solo un año han sido detenidos en Sevilla. El menor se encontraba en unas condiciones deplorables, rodeado de basura, sin vacunar y sin ser atendido por sus padres, que resultaron ser dos toxicómanos con varias órdenes de detención e ingreso en prisión. Gracias a la denuncia de su abuela a la Policía Nacional se abrió una investigación contra la familia, en la que se alertaban de las condiciones insalubres en las que vivía el pequeño.
El relato de la abuela destapó las condiciones de vida del bebé, que residía junto a sus padres en un domicilio en Sevilla en el que había ratas y estaba falto de las más "mínimas condiciones de higiene y salubridad, en completo desorden y con basura esparcida por todos sus rincones". Temía, además, que su nieto pudiera ingerir "accidentalmente" algún resto de las sustancias estupefacientes consumidas "habitualmente" por sus padres.
Ante esta situación, agentes del Área de Protección al Menor (Aprome), pertenecientes a la Jefatura Provincial de Sevilla, de la Unidad del Cuerpo Nacional de Policía Adscrita a la Comunidad Autónoma de Andalucía, se hicieron cargo de la investigación.
El menor se encontraba sin vacunar, sucio y desnutrido
Los investigadores comprobaron que el menor no se encontraba dado de alta en el Registro Civil y no había recibido las vacunas obligatorias del calendario médico-infantil. Por todo ello, con la oportuna orden judicial, los agentes accedieron al interior del domicilio y se hicieron cargo del menor, el cual se encontraba sucio y desnutrido, procediendo a la detención de sus progenitores.
El menor permanece desde entonces bajo la tutela y guarda de la Junta de Andalucía, habiendo sido ingresado en un centro de protección. Sus padres han ingresado en prisión a espera de la resolución de los "múltiples procedimientos" penales que pesan sobre ellos.
