2 de octubre de 2018, 9:35

¿Cuándo podremos celebrar el día mundial del turismo como Jerez se merece?

Por Mercedes Orellana

En relación al día mundial del turismo, que se celebró el pasado 27 de septiembre, quiero hacer análisis de la situación de nuestra ciudad respecto a este sector tan importante, que tantos ingresos genera, y que parece ser la única industria que crece en nuestra provincia.

A pesar de los muchos atractivos que tiene Jerez, aún estamos ante un turismo de proporciones medianas, un turismo que todavía no ha despegado con fuerza. Nos movemos en unas cifras buenas, pero mejorables.

Para aumentar la cantidad y calidad del turismo, es necesario que nuestro gobierno local lleve a cabo una adecuada gestión y promoción de nuestro patrimonio artístico y cultural, y así podremos ver cómo se incrementan las pernoctaciones en los establecimientos hoteleros, al igual que las visitas a bodegas, museos, iglesias, Alcázar, etc.

Por otro lado, es increíble cómo todavía no tenemos un Museo del Vino de Jerez, cuando por todos es conocida la fama mundial de nuestro sherry, de producción y vinificación única y singular de esta zona.

En otros destinos turísticos se valora además el entorno vitivinícola, se aúnan voluntades, y se forman consorcios para ayudar a la mejora de la oferta en general.

Sin embargo aquí seguimos sin sacar partido de nuestra maravillosa campiña, y de sus casas-viñas, que aún pasan prácticamente desapercibidas en los circuitos turísticos de la zona.

Además, el centro de la ciudad necesita una acción revulsiva urgente, que lo rescate del abandono que sufre, de la suciedad y de la inseguridad existente en muchas de sus calles.

Varias cadenas textiles importantes han abandonado recientemente nuestro centro, y eso hay que remediarlo volviendo a traer comercios de calidad, y una hostelería atractiva que haga de esta zona histórica de Jerez un sitio apetecible para pasear, comprar, y donde poder degustar nuestra rica gastronomía.

La oficina de turismo debe dar un servicio más moderno, más actual y visualmente atractivo al visitante. Una oficina del siglo XXI, donde entrar a obtener información resulte una actividad más novedosa e impactante.

Además es importante que el servicio que da la oficina sea más extenso durante el día, ya que las horas en que se puede caminar por la ciudad con algo menos de calor, abarcan más allá de las seis de la tarde.

Hay que dar también servicio de información en otros puntos de la ciudad, como la estación de trenes por ejemplo, punto estratégico de entrada de visitantes.

El turismo de congresos es otro asunto que no está para nada explotado en Jerez. Tenemos un Palacio de Congresos con muy poca actividad durante el año, sólo en determinados momentos se abre para acoger eventos concretos. Actualmente la programación es pobre, pero podría obtener mucho más rendimiento, con una gestión adecuada y una promoción atractiva que consiga diversificar la oferta.

En Jerez tenemos muchas actividades a desarrollar que pueden tener lugar en el Palacio de Congresos, relativas al caballo, flamenco, motor, vino, Semana Santa, zambombas... etc. por lo que creo que se aprovechan muy poco las oportunidades que nuestras fiestas y eventos ofrecen a lo largo del año.

En definitiva, Jerez es digna de un turismo de más calidad, con mayor amplitud de miras, con una oferta atractiva que haga de la experiencia del visitante un momento original e inolvidable, pues ya se sabe que la mejor publicidad es vivir de primera mano la actividad turística y luego transmitir tus sensaciones a familiares, amigos etc, recomendando las bondades del destino.

Como dijo Michelle Bachelet, ex presidenta de Chile, "el turismo es una industria de futuro que no teme a los cambios". De modo que, ¿a qué esperamos para despegar con una oferta moderna e impactante en el ámbito turístico, hostelero, y de restauración a la altura de lo que nuestra ciudad se merece?.

No sólo hay que dar al turista cuando llega al aeropuerto una bienvenida folclórica y como sacada de la película Bienvenido Mr. Marshall, sino que hay que dar un servicio fiable, formal, y de calidad, y eso se hace: