El pasado derbi entre el Betis Deportivo y Sevilla FC estuvo cargado de polémicas; tanto dentro como fuera del campo.
3 expulsiones y un empate por parte del Sevilla en el minuto 81. Tras finalizar el encuentro, el director deportivo de los rojiblancos, Monchi, saltó al campo a celebrar el empate con su afición. Los gestos, protestados por los aficionados locales, no estuvieron libres de polémica; golpes en el pecho y besos.
No es el primer acto polémico que lleva acabo; hace pocas semanas tuvo problemas con la afición sevillista por el gesto que realizó tras destituir al anterior entrenador Julian Lopetegui.