Otra masacre en una escuela de primaria en EEUU. Los ataques con cualquier tipo de arma automática en escuelas, institutos y universidades de EEUU se han convertido en algo habitual. Solo en el mes de septiembre pasado se registraron dos asaltos también en el Estado de Texas.
En esta ocasión, el autor del tiroteo, Salvador Ramos, ha dejado hasta ahora 21 muertos, 19 niños y dos profesoras de la escuela de primaria Robb de la ciudad de Uvalde, en el estado de Texas, Estados Unidos.
Ramos compró el día que cumplía 18 años dos rifles de asalto y también, antes de ir a la escuela y efectuar la masacre, habría disparado a su abuela, según el sargento del Departamento de Seguridad Pública de Texas, Erick Estrada. El autor del tiroteo fue abatido poco después por los disparos de la policía.
Joe Biden, recién llegado de Asia, ofreció un discurso a la nación condenando la matanza. Harto ya por la inacción del Congreso, el presidente de EEUU se pregunta qué tiene que pasar para 'enfrentarnos al lobby de las armas'.
El papa Francisco exigió que termine “la circulación indiscriminada de armas” al final de la audiencia general que ha celebrado en la plaza de San Pedro ante miles de fieles. El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, también ha lamentado el “atroz” ataque armado.
Hasta ahora en 2022 se han producido más de 200 tiroteos masivos en EEUU. Hasta el de la escuela de primaria Robb de la ciudad de Uvalde, el más letal había sido el de Búfalo (Nueva York), donde el 14 de mayo un joven supremacista blanco asesinó a 10 afroamericanos en un supermercado.