Dos personas han sido detenidas por la Policía Nacional y la Guardia Civil acusadas de estafar a 16 personas, generalmente personas de avanzada edad, a las que llamaban por teléfono haciéndose pasar por policías para exigirles una fianza con la excusa de que un hijo o familiar cercano había atropellado a una persona y debían hacerlo con prontitud para no ir a la cárcel.
Los detenidos habrían intentado llevar a cabo sus planes en más de un centenar de tentativas, si bien solo consumaron 16 de sus estafas, lo que les permitió hacerse con 58.800 euros en efectivo y joyas por valor de 250.000 euros, según ha podido confirmar este periódico.
El engaño consistía en hacer creer a personas mayores que su hijo o un familiar cercano estaba detenido por atropellar a una persona o causar un accidente grave de tráfico para luego pedirles dinero con rapidez con el argumento de que podían entrar en prisión.
Pasarse por policía para recoger el dinero
Así, uno de los estafadores se hacía pasar por agente de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para indicar a la víctima que un segundo agente se pasaría por su domicilio en breve para recoger el dinero.
Los estafadores ejercían "mucha presión" sobre las víctimas al decirles que el ingreso en prisión del conductor era "inmediato" y que solo se podía evitar si se pagaba una fianza "muy elevada de dinero". Tras ello el falso agente recoge el dinero en el domicilio de la víctima que en ocasiones entregan joyas al no disponer del efectivo necesario.
De esta manera, localizada la estafa, se inició una investigación mediante el análisis del tráfico de llamadas realizado entre los diferentes terminales. Así, con apoyo de medios tecnológicos, se determinó la identidad de los autores de las estafas.
Segunda detención
El arresto del cabecilla del grupo se realizó en Almería capital tras materializar una estafa en un bloque de viviendas. Los agentes realizaron una rápida búsqueda puerta por puerta para localizar a la víctima, mientras que de forma paralela se siguió al estafador hasta el hotel donde se alojaba.
Como sueleo ocurrir en estos casos, las diligencias instruidas por la Guardia Civil y la Policía Nacional han sido puestas a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 6 de Almería.
