Lo pillaron porque intentó irse sin pagar de un local en la calle Plocia de Cádiz. Es el final de la historia de un prófugo que usaba la identidad de un antiguo compañero de celda para así poder escapar de la acción de la justicia.
En relación a estos hechos, la Policía Nacional ha detenido en Cádiz a un hombre de 53 años de edad y prófugo de la justicia, que utilizaba la identidad de su antiguo compañero de celda cuando cumplió una condena en la prisión de Barcelona para evitar ser descubierto.
Hay que matizar que la intervención se produjo en la tarde del 23 de febrero cuando los agentes fueron requeridos por los responsables de un restaurante para interponer una denuncia contra una pareja de Gerona que se negaba a pagar la cuenta en un local ubicado en la calle Plocia de Cádiz. Argumentaban que tenían que ir a un cajero.
No quería pagar en un local de Cádiz
Fue entonces cuando los agentes llegaron al lugar de los hechos y trataron de identificar a los clientes y al encontrarse indocumentados fueron trasladados a la Comisaría Provincial. Ya allí el hombre aportaba unos datos que no se correspondían con la foto de las bases de datos policiales. Para comprobar su identidad, los especialistas de la Brigada de Policía Científica realizaron un cotejo de las huellas dactilares dando como resultado la identidad verdadera que no se correspondía con la que había comunicado.
Seguidamente, los agentes pudieron contactar con la persona que el detenido decía ser, quien manifestó que se encontraba en Gerona y que con anterioridad había acudido a dependencias policiales al llegarle una sanción desde El Puerto de Santa María, por lo que sospechaba que su identidad estaba siendo manipulada.
Al verse acorralado, el detenido reconoció su verdadera identidad y que usurpaba la de un antiguo compañero de celda de la prisión de Barcelona, donde cumplió una pena privativa de libertad. El hombre fue acusado como presunto autor de un delito de estafa y usurpación de identidad. La Autoridad Judicial resolverá ahora su futuro inmediato.
