El Sevilla FC se libró de la penitencia del descenso ante el Cádiz CF (0-2) en el Nuevo Mirandilla. En el primer encuentro de José Luis Mendilibar al frente del banquillo rojiblanco, el Sevilla venció al Cádiz en un partido no exento de polémica por dos supuestos penaltis no pitados a favor del conjunto amarillo, que no perdía en casa desde el pasado mes de septiembre ante el FC Barcelona. Pese al buen partido de los de Sergio González, los goles de Ocampos y En-Nesyri en el segundo tiempo finiquitaron un partido que permite al Sevilla escapar de la zona baja, empujando precisamente a un Cádiz que podría terminar la jornada en puestos de descenso.
La vuelta tras parón de selecciones tenía deparado un duelo a vida o muerte para Cádiz y Sevilla, ambos empatados con 28 puntos. Después de la destitución de Jorge Sampaoli, José Luis Mendilibar debutaba en el banquillo sevillista con la necesidad de sumar de tres para alejarse de los puestos de descenso de LaLiga Santander.
El encuentro iba a empezar de la manera más polémica. A los dos minutos, el Cádiz CF reclamó un penalti por mano de Gueye. El balón caía de un saque de banda e impactó directamente en la mano del francés. Sin embargo, ni Soto Grado en el césped, ni Medié Jiménez en el VAR, decidieron señalar la pena máxima por considerar que la mano estaba pegada al cuerpo.
Tras el susto inicial, el Sevilla se desquitó de la presión y en la cabeza de En-Nesyri tuvo dos grandes oportunidades para poner el primero. La idea de Mendilibar en el partido estaba siendo clara: correr pocos riesgos atrás y ser eficientes arriba.
El @Cadiz_CF pidió penalti por mano de Pape Gueye. Soto Grado y el VAR no consideraron punible la acción en el área del Sevilla #LaLigaEnDAZN ⚽ pic.twitter.com/yTEVv8uV8Y
— DAZN España (@DAZN_ES) April 1, 2023
Pero al Sevilla FC le estaba costando la vida generarle problemas a un Cádiz que estuvo muy cómodo la primera media hora de juego. Lejos de la anarquía de los últimos partidos, los rojiblancos lograron cierta cordura a través de un centro del campo comandado por Rakitic y secundado por Gueye y Jordán por detrás.
Cuando el partido más espeso estaba, el Cádiz pidió otro penalti por un contacto dentro del área de Jordán al Pacha Espino. El contacto existe, pero el colegiado decidió que no fue suficiente como para decretar penalti.
Sin apenas ocasiones claras, los minutos pasaron en una primera mitad que no terminó de ser mala carta de presentación del equipo de Mendilibar, que logró en el primer tiempo su mejor registro de balones robados en campo contrario.
Ocampos marcó nada más iniciarse el segundo tiempo
El Sevilla FC iba a salir con todo tras el descanso y materializó su leve superioridad poniéndose por delante en el marcador. A los cinco minutos segunda mitad, Lucas Ocampos (50') recogió un rechace dentro del área a la salida de un córner para fusilar a David Gil.
Con el gol el partido empezó a calentarse. Ocampos y Sobrino vieron dos amarillas en cuestión de minutos. Mientras, el Cádiz vivió sus mejores minutos encerrando a un Sevilla que dio un paso atrás tras el gol de Ocampos.
Los de Sergio González se volcaron por completo espoleados por un Nuevo Mirandilla que veía posible el empate. Fue Fali el que tuvo la más clara para los suyos con un balón que se topó con el poste después de un córner.
Precisamente, en la siguiente jugada, y en una acción muy similar, Dimitrovic arrolló a Fali dentro del área. Pero tampoco fue penalti. El colegiado dejó seguir y en el VAR tampoco consideraron la pena máxima.
En Nesyri puso la puntilla al partido
El Cádiz seguía picando piedra y en las botas de Sergi Guardiola contó con una clara oportunidad que pudo haberlo cambiado todo, pues en la siguiente jugada, el Sevilla iba a finiquitar el partido con el 0-2.
En-Nesyri (73') aprovechó una gran asistencia de Bryan Gil para dar una estocada al partido. En dos toques, el Sevilla se plantó en el área local y el delantero marroquí no perdonó ante David Gil.
Este segundo gol desencadenó a que se abrieran muchos más espacios en el partido. El Cádiz no bajaba los brazos y el Choco Lozano casi conecta un cabezazo que se marchó desviado. A la contra, el Sevilla quería terminar de finiquitar el partido pero ni Lamela, ni Óliver Torres, estuvieron acertados.
Al final, Mendilibar firmó su primera victoria al frente del Sevilla FC en un duelo trascendental ante un rival directo para escapar del descenso.
