miércoles. 24.04.2024
Gerencia de la felicidad mindfullness y psicología positiva aplicadas a la empresa
Gerencia de la felicidad mindfullness y psicología positiva aplicadas a la empresa

Hoy en día, ya no se estila el clásico modelo de empresa interesada solo en la producción. Esto no significa que ya no haya organizaciones así, eso sería una utopía; pero sí que ya no está bien visto que una empresa se centre tan solo en obtener beneficios, y no tenga en cuenta el bienestar de sus empleados.

Pues bien, si hace tiempo que el mindfullness es una tendencia en el mundo laboral, desde que surgió la pandemia lo es aún más. La situación vivida ha traído un importante nivel de estrés a la vida de las personas, y así las cosas, ahora son muchas más las grandes empresas que han decidido cuidar el estado de ánimo de los trabajadores apostando por disciplinas como la psicología positiva.

¿Qué es un gerente de la felicidad?

Lo que acabamos de explicar ha hecho que aparezcan figuras tan interesantes como la del gerente de felicidad, un profesional encargado de orientar a los miembros de la organización para conseguir un buen clima de trabajo. Para ello debe contar con una serie de aptitudes y conocimientos que le permitan atender las dudas que surjan, y promover siempre una buena relación entre los compañeros de trabajo.

Estas personas tienen que hacer un trabajo de coaching no solo sobre los empleados, sino también sobre los superiores de la empresa. A su vez, estos últimos deben entender que su capital más importante son las personas, y que para que estas den lo mejor de sí, tienen que sentirse cuidadas. Así pues, los líderes han de saber que son las fortalezas personales, y todo lo que ellos pueden hacer para contribuir a que los empleados detecten cuáles son las suyas y les saquen el máximo rendimiento.

La necesidad de que tras un empleado, haya una persona feliz

A día de hoy, en un momento en el que aún no nos hemos recuperado de los efectos devastadores de la pandemia, las empresas se hacen más conscientes que nunca de que tienen que integrar una serie de estrategias en las que la felicidad de las personas sea una prioridad, ya que esta se traduce en una mayor competitividad. Así pues, las propias organizaciones deben facilitar los medios para que cada individuo que forme parte de las mismas se sienta satisfecho y pleno.

Y es que, tal como explica Tal Ben-Shahar, doctor en Psicología, es posible aprender a llevar una vida más feliz. Para ello hay que centrarse especialmente en las relaciones, que tienen un papel clave en la felicidad de las personas. Otros aspectos de vital importancia en este ámbito son la gratitud, o la capacidad de apreciar las cosas buenas de la vida.

La figura del empresario que no hace más que dar órdenes, y al que no le preocupa en absoluto cómo se sientan los empleados, ha quedado obsoleta. Es evidente que esta actitud no es ética, pero al margen de esto, la experiencia ha demostrado de sobra que esto no hace más que crear un clima tóxico en la empresa que juega muy en contra de sus intereses.

A fin de cuentas, y como es lógico, los empleados que no se sienten felices con el trato recibido no se interesan tanto por mejorar en su puesto de empleo y escalar posiciones en su empresa, como por encontrar un trabajo en otra organización diferente.

¿Cuáles son los beneficios de la gerencia de la felicidad?

Como ya sabemos, para que una empresa funcione bien, los empleados deben sentirse satisfechos. Una presión por encima de lo normal, o un trato inadecuado, quizás puedan producir resultados a corto plazo. Pero a largo plazo, se volverán en contra de los intereses de la propia organización, ya que los trabajadores no se sentirán motivados para seguir creciendo dentro de la misma. Y como ya se ha señalado, en su lugar, buscarán la forma de ser contratados en otro sitio.

De ahí que la gerencia de la felicidad produzca el efecto contrario. Es decir, si un empleado se encuentra feliz en su empresa y tiene un buen ánimo a la hora de trabajar en la misma, sentirá el deseo de contribuir al crecimiento del grupo, y tratará de sumar y no de restar. Como es evidente, esto redunda en una mayor productividad, ya que si un empleado encuentra sentido a aquello que hace, se sentirá más comprometido y rendirá mejor.

El desafío de la gerencia de la felicidad: del proyecto a la realidad

Lo cierto es que la gerencia de la felicidad se ha implementado ya en un número importante de empresas, pero en otras continúa siendo un proyecto que no termina de concretarse. Es decir, hay sitios en los que se sabe que es importante que los empleados se sientan bien, pero nunca se encuentra el momento para elaborar un plan para conseguirlo.

Por ello es importante recordar la importancia de que en el ámbito empresarial se haga una fuerte apuesta por el bienestar laboral, tomando las iniciativas necesarias para que los trabajadores se sientan realizados y no terminen abandonando sus puestos. Y ahí, precisamente, es donde entra en juego la gerencia de la felicidad.

Gerencia de la felicidad: mindfullness y psicología positiva aplicadas a la empresa