Cristina Pedroche o el adelanto del verano

De nuevo la modelo y presentadora será embajadora de la marca Ipanema

El verano ha llegado anticipadamente. El verano precipita su estación. El verano tiene prisa. El verano regresa por sus fueros. No ha sido necesario ni que comience ni finalice la Semana Santa. Cristina Pedroche no ha tenido empacho en adelantárnoslo. Cómo ella sabe hacerlo: con los pies en el suelo. Con los tobillos al aire. Pisando fuerte. Pisando ante la cámara. Y promocionando, que es adarme de su oficio. Cristina protagoniza una campaña fresca, como la espontaneidad de su sonrisa. Como el dilecto y directo don de su capacidad mediática.

La firma de zapatos Ipanema ha confiado de nuevo en la joven modelo y presentadora. Cómo no hacerlo si la pasada temporada arrasó en impactos y en índices de venta. Chica Ipanema 2018 cuando aún no ha comenzado -está a punto de hacerlo- la temporada primera verano. Y la chica ya ha mostrado su pose. Sandalias que se adecuan al espíritu transgresor de Pedroche. Y aventurero. Una embajadora práctica y pragmática.

Cristina está de moda. Y precisamente moda es cuanto estila. Las firmas se la rifan pero es Ipanema la que renueva contratos. Pedroche es un signo de admiración que también calza chanclas. Ante la negrura de tantas noticias desagradables que suceden en el diablo mundo, en general, y en el suelo patrio, en particular, emerge el colorido de una campaña con nombre brasileño. Puro Brasil para combatir el candor y el calor de la fértil tierra española. La niña de las transparentes campanadas de fin de año sabe donde pisa.