jueves. 28.03.2024
Bertin Osborne
Bertín Osborne

Puede llamarse a confusión pero no es así. De un tiempo a esta parte de habla de las hijas de Bertín Osborne en número de cuatro cuando en puridad siempre se ha entendido que son tres. Existe una cuarta,  Ana, que no es hija de Bertín pero sí de Sandra Domecq, fallecida en 2004, y del empresario Fernando Portillo. Ambos tuvieron una relación tras la ruptura de Sandra con el cantante y presentador.

¿Qué podemos decir de Ana Portillo? De entrada que está muy unida a sus otras tres hermanas. En una relación de clara ejemplaridad familiar. Ana Cristina Portillo cuenta con  27 años de edad y es, como las hijas de Bertín, muy guapa. Labora en una empresa de servicios portuarios y logísticos. Concretamente en su departamento comercial.

Buen currículum académico

 

Con anterioridad había trabajo en la banca privada. Estudió la carrera de Administración de Empresas en el Centro Universitario Villanueva. Durante la misma también estudió un curso en el prestigioso Berkeley College de Nueva York, universidad especializada en negocios. Posteriormente hizo un máster en Iniciativa Emprendedora en la Escuela de Organización Industrial.

Es inquieta y no puede estar parada. Muy tenaz y trabajadora. Y es que, además de su trabajo de ejecutiva en el sector empresarial, Ana Cristina también destaca, también descolla como influencer en Instagram. La joven, que suma, grosso modo, alrededor de 15.000 seguidores en la red social, también  asimismo promociona algunas marcas.

Elegante por dentro y por fuera

 

Es elegante como ella misma. Por dentro y por fuera. Ana Cristina ha sido imagen de El Corte Inglés junto a sus hermanas, ahí es nada, un bellísimo póker de ases así como de diseños de vestidos flamenca de Lourdes Montes. ¿Qué podemos decir de sus aficiones? Los caballos. Montar a caballo es su pasión.

Le encanta la equitación. Por descontado. Pero no es el único deporte que practica. Verbigracia el surf. El surf le da sensaciones de libertad. De contacto con lo natural. Lo práctica mayormente en verano, que es época que se presta a ello. Y no todo queda en el mar. El esquí igualmente es otro de sus fuertes.

Bertin Osborne

El noble arte de la pintura

 

Para relajarse, el noble arte de la pintura. Y viajar. Para abrir la mente, para conocer mundo. Para fundirse con la vida. Ana Portillo perdió a su madre cuando contaba tan sólo con 11 años de edad. Siempre ha estado, sí, muy ligada a sus hermanas Alejandra, Eugenia y Claudia. Las tres, tan simpáticas y tan cariñosas a la vez. Y tan entregadas al concepto más amplio de la urdimbre familiar.

Como no podía ser de otro modo, Bertín Osborne la considera una hija más. La quiere y la aprecia muchísimo. Cabe recordar el profundo dolor que causó en todos la muerte de Sandra Domecq, una señora de los pies a la cabeza. Una mujer ejemplar donde las haya. Una madraza que dejó un tierno recuerdo y un profundo legado a quienes la conocieron.  

Por esta razón cuando figuradamente se habla de las hijas de Bertín también se incluye a la hija de su primera mujer. Es un modo de hablar que todos conciben y reciben con agrado. La cohesión familiar consiste en eso precisamente: en la relación de amistad y de cariño de unos con otros. Bertín Osborne, ya se sabe, es especialmente sensible con sus hijos. Con los niños. Con los jóvenes. Como gran persona con valores que indudablemente es.

¿Quién es la cuarta “hija” de Bertín Osborne?