viernes. 19.04.2024
Unidad de Cuidados Intensivos
Unidad de Cuidados Intensivos

Una joven brasileña de 25 años murió de Covid-19 en un hospital de São Paulo (Brasil), después de someterse a una cesárea de emergencia para tener a su bebé. El parto salió favorablemente, pero la madre perdió la vida tras permanecer más de una semana intubada.

La mujer, identificada como Andressa Josefa dos Santos, no presentaba enfermedades crónicas que aumentaran el riesgo de fallecer por el SARS CoV-2, sin embargo la enfermedad se complicó, tuvo una fuerte anemia y falleció sin conocer a su hija. 

Andressa tuvo sus primeros síntomas de Covid-19 el 25 de abril, por lo tanto, empezó un tratamiento para la enfermedad. El pasado 2 de mayo fue internada en un hospital de Santos, en la costa de São Paulo, por cansancio y falta de aire. Su estado fue empeorando poco a poco: ocho días después, el 10 de mayo, decidieron someterla a una cesárea de emergencia. Ese mismo día le dijeron que tenía que ser intubada lo más pronto posible.

Bebé de siete meses

La bebé nació de siete meses y tuvo que ir a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) neonatal. El medio local ‘G1’ informó que la bebé está estable. Dio negativo a la prueba de covid y fue enviada a planta. Después del nacimiento de la pequeña, la familia de Andressa se movilizó en redes sociales para pedir donaciones de sangre, ya que la madre padecía anemia mientras estaba internada en UCI.

No resistió a la hemodiálisis

Cuatro días después de que fuera intubada, su función renal se deterioró y sufrió de una infección, por lo que la sometieron a una hemodiálisis. Su cuerpo no resistió este procedimiento y, el pasado viernes 21 de mayo Andressa murió.

"Mi hermana era guerrera, luchó hasta el final. Pero Dios tiene un propósito en nuestra vida y hoy su trayectoria termina aquí en la Tierra, a los 25 años. (...) Su cuerpo se fue, pero ella vive con nosotros para siempre, en nuestros corazones y en el de su hermosa y guerrera hija, Anna Clara”, dijo  su hermana Daiane Josefa dos Santos.

"Andressa siempre ha representado el lado bueno de la gente. Nos hizo creer que no existe el mal. Fue una compañera, ilusionada, feliz, y sin duda sería una gran madre. Los últimos días han estado llenos de angustia y sufrimiento, pero también llenos de amor”, afirmó Gilberto dos Santos, el novio de Andressa. “Nos deja el recuerdo de su inocencia, carisma y complicidad. También nos deja una parte de ella, que se llama Anna Clara”, concluyó.

Muere por Coronavirus una mujer tras someterse a una cesárea