
La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), dependiente del Ministerio de Sanidad, ha afirmado que actualmente "no se puede establecer que exista una relación causal entre la aparición de miocarditis o pericarditis y la vacunación" contra el Covid-19.
En concreto, fue el Comité para la Evaluación de Riesgos en Farmacovigilancia europeo (PRAC) de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) quien inició este estudio sobre el Covid-19 tras conocerse una serie de casos comunicados en Israel.
Sin embargo, la mayoría de estos casos no fueron graves, se resolvieron en unos días y en su mayoría afectaron a hombres jóvenes (menores de 30 años). Los síntomas comenzaron unos días después de la administración de la vacuna contra el Covid-19, casi todos tras recibir la segunda dosis de la vacuna de BioNTech/Pfizer.
Por su parte, en los países del Espacio Económico Europeo (EEE) también se han recibido notificaciones de miocarditis y/o pericarditis para las distintas vacunas que se están administrando.
Miocarditis y pericarditis, frecuentes entre la población
Estas patologías se presentan habitualmente en la población general, frecuentemente se relacionan con infecciones previas o con enfermedades inmunes. Su frecuencia de aparición en la población europea se ha estimado en 1 a 10 casos al año por cada 100.000 habitantes.
Asimismo, la incidencia de miocarditis y pericarditis en España, estimada a través de los datos del Programa BIFAP, es de 11 casos anuales por cada 100.000 habitantes.
Los síntomas de miocarditis/pericarditis son variables, frecuentemente incluyen dificultad para respirar, palpitaciones que pueden acompañarse de ritmo cardiaco irregular y dolor precordial. Estas condiciones habitualmente mejoran por sí solas o con el tratamiento adecuado.
En este momento, Sanidad explica que "los datos disponibles no permiten concluir que exista una relación de causalidad con la administración de las vacunas". "La miocarditis y pericarditis son patologías que se presentan con cierta frecuencia en la población independientemente de la vacunación", justifican.
En cualquier caso, el PRAC sigue evaluando toda la información disponible y ha requerido información adicional a los titulares de la autorización de comercialización.
Mientras tanto, recomiendan a los ciudadanos que "acudan al médico si en los días siguientes a recibir la vacuna apareciese dificultad para respirar, palpitaciones que pueden acompañarse de ritmo cardiaco irregular y dolor en el pecho".