Un tremendo crimen que, por fin, va a tener resolución judicial en las próximas semanas. Nos referimos al protagonizado por un hombre que mató a su madre asfixiándola con un cinturón en el barrio de Palmete de Sevilla.
En este sentido, un jurado popular enjuiciará a partir del próximo día 27 de marzo en la Audiencia de Sevilla a un hombre acusado de matar a su madre, de 72 años, tras asfixiarla con un cinturón en la vivienda en la que ambos convivían en el barrio de Palmete de la capital hispalense en mayo de 2022.
Es por ello que el Ministerio Público solicita para el acusado, J.L.C., actualmente de 50 años de edad, un total de seis años de cárcel por un delito de homicidio con la agravante mixta de parentesco, la atenuante de confesión y la atenuante cualificada de alteración de impulsos por adicción de larga duración a drogas.
Mata a su madre tras asfixiarla con un cinturón en Sevilla
De esta manera, los hechos tuvieron lugar sobre las 7,30 horas del día 19 de mayo de 2022 en la vivienda en la que convivían el acusado y su madre en la capital hispalense, concretamente en la calle La Roda de Andalucía, cuando ésta última le quitó el candado de la puerta del dormitorio.
Fue entonces cuando el encausado salió de su dormitorio, "comenzando su madre a insultarle" y manteniendo ambos entonces una discusión verbal, en el transcurso de la cual el investigado cogió un cinturón con el que rodeó el cuello de su madre y la asfixió hasta provocarle la muerte.
Luego llamó por teléfono a la Policía pidiendo ayuda y reconociendo haber matado a su madre, permaneciendo en la vivienda hasta la llegada de los agentes, motivo por el que la Fiscalía le aplica la atenuante de confesión que rige en estos casos.
Única persona de la familia que convivía con su madre
Según ha podido conocer este medio, el acusado "era el único de la familia que convivía con la madre, al separarse de hecho el padre y marcharse otra hermana, ambos por la imposible convivencia" con la víctima, de quien manifestaban los familiares "que tenía problemas mentales no diagnosticados", una situación "agravada" por el suicidio de otra de sus hijas.
Finalmente, hay que añadir que la Fiscalía añade que el acusado tiene sus capacidades levemente alteradas por su consumo prolongado de hachís desde los quince años, mientras que, en el momento de los hechos, no tenía disminuidas sus capacidades intelectivas pero sí presentaba una alteración moderada del control de impulsos.
