viernes. 26.04.2024

Paco Molina, siempre en el recuerdo

Familiares y amigos de desaparecidos recuerdan el 2 de julio a Paco Molina con la inauguración de una exposición

Familiares y amigos de desaparecidos, pertenecientes a la asociación Afadecor fundada en Córdoba por la familia de Paco Molina, que tenía 16 años cuando desapareció en julio de 2015 en dicha capital, junto a otras personas y la Fundación QSDglobal por las personas desaparecidas organizan un acto el jueves 2 de julio en recuerdo de Paco en el Bulevar de Gran Capitán, en el que se inaugurará la exposición al aire libre ‘Ausencias, nuestros desaparecidos’, con música de la cantante Ana de Lois.

El jueves 2 de julio se cumplen cinco años de la desaparición del joven cordobés y su familia “no se rinde y mantiene la esperanza de poder encontrarle”. Es un varón de 1,75 centímetros y 75 kilos de peso, de constitución atlética, cabello corto y negro, ojos castaños y con un marcado acento andaluz.

Paco salió un jueves y avisó a su padre de que no iría a dormir en casa esa noche; se quedaba con un amigo al que sus padres conocen. Desde ese día no se volvió a saber de su paradero. Sus progenitores, Isidro y Rosa, han dedicado todo su tiempo a difundir la imagen de su hijo y “promover sin descanso todo tipo de acciones para localizarlo”.

Por este motivo, desde la fundación solicitan el apoyo para arropar a la familia en el acto del jueves y “respaldar a todos aquellos que viven la dura experiencia de tener a un ser querido desaparecido sin causa aparente”.

Cabe señalar que ‘Ausencias, nuestros desaparecidos’ es una exposición de carácter itinerante que por primera vez muestra imágenes de familiares de personas desaparecidas junto a los retratos de sus seres queridos ausentes. Está compuesta por 24 rostros –madres, hijos, hermanos…– que “buscan ser mirados por los ciudadanos reclamando su apoyo”.

Los padres de Paco Molina expresaron hace unos días que esperan poder encontrarlo en caso de que haya sido atendido en algún hospital en la crisis sanitaria por el coronavirus, junto a otros desaparecidos, para lo cual prevén promover un escrito con la Fundación QSDglobal con tal de que el Centro Nacional de Desaparecidos (Cndes) pueda actuar a través del Ministerio de Sanidad y “ver si alguno de los desaparecidos ha pasado por algún centro sanitario”.

En este sentido, su padre, que es uno de los impulsores de dicha asociación, declaró que “en esta situación da tiempo a pensar y darle vueltas a las formas de poder ayudar y encontrar no sólo a nuestro hijo, sino a más desaparecidos”, de ahí que confíe en la gestión con el Gobierno. Su madre confesó que “la angustia de no saber qué ha pasado es mucho peor que el confinamiento”.

Entretanto, Isidro indicó que en estos casi cinco años ha comprobado que “la gente que ha sufrido algo, algún problema, empatiza mucho más con esta situación, con las familias que tienen un ser desaparecido”. Así, espera que “esta desgracia que vive todo el mundo –por la pandemia del coronavirus– haga más empáticas a las personas con este problema”.

Paco Molina, siempre en el recuerdo