El Real Betis saca un meritorio empate ante un Real Madrid (0-0) que se aleja aún más del FC Barcelona en su lucha por LaLiga Santander. El equipo de Manuel Pellegrini se sobrepuso a las bajas y tiró de unión para firmar un empate que les acerca un poco más a la zona Champions League. Un gran Rodri y la solidez defensiva, permitieron al Betis soñar por un premio mayor en un partido en el que ni Benzema ni Vinicius tuvieron su mejor actuación.
Los de Manuel Pellegrini apelaban a la unidad del grupo antes del inicio del partido. Sin Canales, y sin Fekir, que se perderá el resto de temporada, el Betis recibía al Madrid después de tres victorias seguidas en LaLiga Santander y con la intención de seguir la racha para situarse a tan solo un punto de los puestos de Champions League.
El partido comenzó sin un dominador claro. El Real Betis quería aprovechar el empuje inicial de su afición y muy rápidamente Ayoze puso en aprietos a Courtois con un disparo seco desde fuera del área.
A los 11 minutos llegó el primer susto del partido para el Betis. El VAR actuó en favor de los verdiblancos al señalar mano de Rüdiger dentro del área tras una falta lanzada por Karim Benzema. El balón rebotó en la mano del alemán y en la sala VOR no dudaron en anular el tanto visitante.
A partir de aquí, el Madrid se encomendó a las cabalgadas de Valverde y Vini por las bandas, algo que sufrieron más que nadie Sabaly y Miranda, sobre todo a la hora de replegar tras un ataque. Sin embargo, por el centro los blancos también inventaban por mediación de Benzema y Rodrygo, que estaba siendo de lo mas peligroso del Madrid.
Sin demasiados apuros en defensa, pero sin tampoco claras en ataque, el Betis fue apurando los minutos hasta el final de la primera mitad. De hecho, una de las más claras se dio en la última jugada del primer tiempo, pero cuando Rodri ya encaraba el área, el colegiado invalidó la acción por una falta previa que enfadó al Villamarín.
Courtois salvó al Madrid del tanto de Borja Iglesias
Con los mismos 22 protagonistas sobre el verde, el Betis iba a tener la primera del segundo tiempo con un tiro lejano de Ruibal al que Courtois respondió con una acrobática parada. Inmediatamente, replicó Benzema con un disparo que obligó a Claudio Bravo a emplearse a fondo.
Pero lo que estaba sacando de quicio al Betis era el arbitraje de Soto Grado. A la amarilla de William Carvalho por protestar una acción antes del descanso se le sumaron las de Sabaly y Borja Iglesias. Con cualquier mínima acción bética, el brazo del colegiado saltaba como un resorte.
El partido se rompió por minutos y de un mano a mano de Borja Iglesias que salvó de forma milagrosa Courtois, llegaron dos claras oportunidades del Madrid. Para fortuna bética en una de ellas, Claudio Bravo supo emendar su error al intentar atrapar un tiro lejano de Valverde y evitó el tanto madridista.
Rodrygo perdonó lo imperdonable. Solo ante Bravo, el brasileño desaprovechó el regalo de Valverde desde el costado y envío su remate por encima del larguero.
Si Ancelotti daba entrada a Ceballos y Nacho para ganar control en el partido, Pellegrini decidió recurrir a Luiz Henrique y Willian José en sustitución de Borja Iglesias y Ayoze, para aportar algo más de frescura en la parte ofensiva.
La tragedia parecía mascarse a fuego lento en el Villamarín. Con el Madrid cada vez más asentado en el campo del Betis, Ceballos tuvo en sus botas la oportunidad de convertirse en el villano perfecto de la película. Su tiro se marchó por muy poco para alivio de la afición verdiblanca, que no quería volver a vivir lo ocurrido en 2019.
En los últimos minutos el partido podía caer para cualquier dirección. Betis y Madrid llegaban los dos con cierta facilidad a las áreas pero ninguno terminaba de encontrar el camino del gol.
Con cinco minutos de descuento, ambos conjuntos se terminaron de volcar en busca del gol que cerrase el partido. Luiz Henrique, con un disparo lejano, se acercó a la gloria pero se marchó desviado. En lado blanco, Benzema intentaba la heróica pero no se daba. Al final, Betis y Madrid firmaron un empate a cero que aleja a los blancos de su lucha por LaLiga y acerca un poco más al Betis de su objetivo de alcanzar los puestos de Champions League.
