viernes. 29.03.2024

Agentes de la Policía Nacional han desarticulado en las provincias de Cádiz y Málaga una organización que ofertaba a inmigrantes en situación irregular en España la obtención a cambio de dinero de permisos de residencia y trabajo amparados en contratos ficticios y en distintos documentos simulados.

El precio oscilaba entre los 2.000 y 4.500 euros, cantidades que obligaba a los inmigrantes a desprenderse de sus escasos ingresos; e incluso solicitar a su familia de origen ese dinero, según han informado desde la Policía Nacional en un comunicado.

La investigación se inició al tener conocimiento que un ciudadano extranjero estaba tratando de solicitar un trámite de residencia amparándose en un contrato de trabajo falso; y una serie de documentos que no tendría correspondencia con la realidad a fin de demostrar su residencia en España desde 2017. Por todo ello se detuvo al solicitante como presunto autor de un delito de falsedad.

Unidad Contra las Redes de Inmigración Ilegal

Fruto de las gestiones realizadas, los investigadores de la Unidad Contra las Redes de Inmigración Ilegal y Falsedad (Ucrif) de la Comisaría de Algeciras (Cádiz) descubrieron la existencia de una organización perfectamente estructurada. Y formada por al menos cinco personas, de las cuales tres son abogados.

La citada organización estaba asentada entre las provincias de Málaga y Cádiz; cuyos miembros se aprovechaban de la situación de vulnerabilidad en la que se encontraban sus víctimas; muchas de las cuales habían llegado a España a bordo de pateras y necesitaban acreditar su permanecía en España como mínimo durante tres años para solicitar el Informe de Arraigo Social y acogerse a la situación de residencia temporal por circunstancias excepcionales, han explicado.

El operativo policial ha finalizado con la detención de siete personas, de las que tres eran ciudadanos extranjeros en situación irregular. La investigación continúa abierta, no descartándose nuevas detenciones.

Operaciones precedentes

La Guardia Civil y la Policía Nacional, en la operación ‘Candil-Fuagras’, desmantelaban hace semanas en Melilla una organización delictiva dedicada al tráfico de hachís y de migrantes. En total, se ha detenido a ocho personas e investigado a otras dos, con un amplio historial delictivo; por los presuntos delitos de organización criminal, contra la salud pública y contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.

Según explican ambos cuerpos en una nota de prensa, recogida por ELMIRA.es, la investigación se inició el pasado mes de septiembre. Todo cuando se detectó la existencia de un grupo organizado dedicado al transporte de sustancias estupefacientes desde Melilla a la península; bien directamente con embarcaciones de alta velocidad, o a través del método de ‘salto’ o transbordo en alta mar entre embarcaciones.

Acaban con una red que engañaba a inmigrantes en Málaga y Cádiz