El truco de `1 euro´ que te puede salvar la vida en la carretera o evitar una multa
La DGT recomienda revisar el estado del vehículo antes de iniciar tu trayecto hacia las vacaciones de verano
Llega julio, y con él, cientos de miles de desplazamientos en busca de disfrutar de la playa y de unas merecidas vacaciones, pero, ¿hemos revisado si el coche está preparado para ello?.
La mayoría de conductores, antes de hacer un viaje de gran trayecto, revisan el estado del aceite, aire acondicionado (para no pasar excesiva calor dentro del vehículo), el estado del nivel del agua anticongelante y la presión de los neumáticos.
Eso sí, son demasiados conductores los que reconocen que se quedan ahí, en tan solo comprobar la presión de los neumáticos, sin prestar excesiva atención al estado en el que se encuentran estos, aun a sabiendas de la importancia de estos, ya que son quienes mantienen al vehículo en contacto con el asfalto.
Es lógico que se preste más atención a cuánto carburante llevamos en el coche y la necesidad de repostar para que no se pare el coche a mitad de camino, pero el estado de los neumáticos es igual de importante, ya que nos puede evitar de un accidente.
Por ello, debemos prestar mayor atención a la hora de cambiarlos ya que, aunque al comprar unos más baratos para ahorrar un poco, al final puede salirnos caro, debido a que estos en una maniobra de emergencia son menos seguros.
Además, debemos de tener en cuenta que, circular con los neumáticos en mal estado puede acarrear una sanción de hasta 800 euros, por poner en riesgo tanto tu integridad como la del resto de usuarios de la vía.
Por ello, la Guardia Civil recuerda un método muy sencillo para comprobar el desgaste de la banda de rodadura con una simple moneda de 1€.
Si la parte dorada queda oculta en la rodadura del neumático significa que existe profundidad suficiente en términos legales para circular (1.7 milímetros). En cambio, si la zona dorada queda al descubierto deberían de ser renovados con urgencia.
Aún así, las autoridades recuerdan que, si apuestas por tu seguridad, deberías cambiar tus neumáticos cuando la profundidad de su dibujo baje de 3 milímetros.
