El padre de Ana Obregón, Antonio García Fernández, ha estado ingresad en Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). del Hospital Ruber de Madrid por una grave infección. Al hombre de 95 años le han puesto un marcapasos para controlar los latidos de su corazón.
Antonio García, recibía el alta hospitalaria con opción de vuelta a la UCI del Hospital Ruber si fuese necesario. El padre de Ana Obregón ha mejorado tras días de ingreso por una terrible infección que podría haberle quitado la vida, lo que sería un grave golpe para la bióloga.
Ana no se imagina cuánto dolor le causaría la muerte de su padre en un año lleno de pérdidas. Recordemos que la actriz española tuvo que soportar la muerte de su hijo Alessandro y la de su madre, Ana María.
Tras llevar ingresado días en observación, le han colocado un marcapasos en el corazón. Este aparato fue necesario para llegar a controlar los latidos de su corazón, imitando así la acción de su sistema eléctrico natural que a sus 95 años no puede desarrollarlo sin ayuda.
El marcapasos de Antonio García
Así, Antonio García Fernández de 95 años, se ha recuperado por lo pronto, tras la intervención y colocación de un marcapasos en su pecho para así poder desarrollar de una forma artificial el buen ritmo de su corazón.
Eso no significa que lo necesite siempre todo el tiempo, mientras su corazón se desenvuelva con normalidad no habría necesidad de usar este mecanismo funcionando solo cuando es necesario. Si los latidos de su corazón son demasiado lentos (bradicardia), el marcapasos envía señales eléctricas al corazón para corregir los latidos.
Los riesgos de una colocación de marcapasos
- Infección
- Reacción alérgica al tinte o a la anestesia
- Hinchazón, hematoma o sangrado
- Daño en los vasos sanguíneos o nervios cerca del marcapasos
- Colapso pulmonar
Sin embargo, el papá de Ana no ha tenido ningún tipo de problema en este sentido y se encuentra descansando ya si fuera del hospital. Ana ha compartido en redes sociales, más concretamente en Instagram, como se siente al respecto demostrando un gran amor a su padre que no pudo despedirse de su mujer ya fallecida.
