viernes. 19.04.2024

Muere un niño de hipotermia al estar castigado a dormir en el garaje

El menor, de 8 años, era autista y sufría maltratos

Canallada sobre canallada. Una noticia indignante. Un niño de 8 años ha muerto trágicamente a causa de una hipotermia, después de que sus padres lo hayan castigado a pasar la noche en el garaje de su casa sin calefacción. La criatura era autista, y, a más inri, la pareja lo maltrataba regularmente a él y a sus hermanos.

Los hechos -de tan penosa consecuencia- han sucedido en el barrio de Long Island, en Nueva York (EE.UU.). Los padres han llamado a la Policía y han asegurado que el pequeño se había caído y había perdido el conocimiento. Una versión harto extraña y no del todo creíble.

Agentes de la Policía se desplazaron de inmediato hasta la casa, donde el padre de Thomas, la criatura, le estaba practicando maniobras de reanimación. Con cierto estado de nerviosismo. Los servicios de emergencias con toda rapidez han trasladado al niño al hospital, pero a pesar de los esfuerzos de los sanitarios, no han podido hacer nada por él. No pudieron finalmente salvarle la vida.

A pesar de las inexactitudes y de las mentiras de la pareja, las pruebas médicas realizadas han mostrado que el pequeño, que sufría autismo, ha muerto por hipotermia. Fuentes policiales aseguran que Thomas "fue sometido a temperaturas de congelación" en el garaje "durante la noche". En aquel momento, la temperatura era de -7 ºC.

No había dudas. Aparte de la autopsia, las cámaras de seguridad de la casa de la familia han sido cruciales, del todo decisivas, para descifrar las causas concretas de la muerte de la víctima. A mayor abundamiento la Policía también ha descubierto que los padres también castigaban a sus otros seis hijos: los dejaban sin comida y les hacían sufrir con temperaturas extremas. Blanco y en botella.

"Todavía estamos investigando la extensión del abuso y si llegó a todos los niños", ha explicado un portavoz de la Policía. Finalmente, las autoridades han acabado deteniendo a la pareja. El padre tiene 40 años y es Policía, y la madre tiene 42 años. Por su parte, los menores han quedado a cargo de los Servicios Sociales. Una triste historia que jamás debería haber sucedido.

Muere un niño de hipotermia al estar castigado a dormir en el garaje