miércoles. 24.04.2024

Pavías de bacalao, un bocado exquisito de Cuaresma

Receta y curiosidades de un plato cuaresmal por excelencia

La Cuaresma es una época para comérsela. La mires por donde la mires. Porque su gastronomía tradicional ofrece recetas para todos los gustos. Y para todos los públicos. Hablamos de pactos con los platos. Con los platos a la antigua usanza que se hacen modernos en su conservación. Uno de los platos más esperados y más anhelados es el que ofrece las conocidas pavías de bacalao. Uno de los platos exquisitos de Cuaresma por excelencia.

¿Qué podemos decir de estas pavías? De entrada que son recomendables para cualquier grupo de edad y muy especialmente para fomentar el consumo de pescado entre los más pequeños de la casa. Ya sabemos cómo gusta a los niños este producto. El plato está cocinado con una base de pescados y mariscos y pertenece a los platos de la cocina tradicional. Por regla general se consume, principalmente, durante todo el año y suele servirse a los comensales como entrante.

Hay quienes afirman que estos pavías o, por mejor decir, estos soldaditos de pavía fueron concebidos en una taberna de la calle Tetuán de Madrid, donde sería costumbre consumir esta tapa en la barra siempre acompañada de un vasito de vino. Consumo entonces de la clase obrera. Y bastante humilde.

Veamos la receta. Ingredientes: 500 gr. de bacalao desalado, 1 limón, una pizca de pimienta blanca, 200 gr. de harina, un vaso de agua, 15 gr. de levadura en polvo, 3 cucharadas de aceite de oliva, sal y aceite para la fritura. Información Nutricional: Calorías: 315 kcal / 100gr

Grasas: 1.7 gr / 100gr. Proteínas: 75 gr / 100gr.

¿Cómo se cocina? Corta el bacalao en tiras no muy gruesas y marínalas durante 15 minutos con zumo de limón y pimienta. Para el rebozado: Pon la harina en un bol grande. Haz un hueco en el centro y añade una pizca de sal, la levadura en polvo, las tres cucharadas de aceite y el vaso de agua fría. Mezcla todos los ingredientes hasta conseguir una masa homogénea, sin grumos. Deja reposar la mezcla, tapada, en un lugar templado durante 15 minutos.

Cuando la masa haya reposado, baña las tiras de bacalao en esta pasta y fríelas en una sartén con abundante aceite de oliva caliente. Una vez estén bien doraditas, escúrrelas bien y deposítalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite. Servir bien calientes. Y a disfrutar de su sabor. De su excelencia. De su tradición. De su conservación.

Pavías de bacalao, un bocado exquisito de Cuaresma