El colegio salesiano afirma que no le pegaron entre veinte niños sino solo cinco
El director del centro educativo Manuel Lora Tamayo comunica que "el hecho se produce, pero que es como si te pego una torta y me dices que te he fusilado"
Afirman, contrariamente a la versión de los padres, que una maestra de guardia en el recreo se percató e intervino, inmediatamente, separando a los alumnos implicados
El colegio Manuel Lora Tamayo de Jerez ha enviado una nota de prensa a los medios en referencia a la noticia publicada en El MIRA sobre las declaraciones de unos padres que relataban que su hijo había sufrido una paliza en el patio del recreo el pasado jueves.
Hay que recordar que según comunicó el padre del menor a MIRA Jerez: "tras una discusión con un alumno en la hora del recreo, dicho estudiante instó a una clase entera de primaria para que le golpeasen entre todos. El niño indicó que le pegaron una paliza entre veinte menores de edad, desconociéndose el número concreto real de los agresores, en su mayoría de un curso de primer ciclo de Primaria. El niño terminó en el suelo, donde aprovecharon para golpearle repetidamente en la cara, las costillas, la espalda, los brazos. Acabó acurrucado llorando de dolor en el suelo, y yo me pregunto ¿Dónde estaban el profesorado? Desde la hora del recreo hasta las dos de la tarde que el niño sale llorando del colegio, ¿por qué no se nos avisa a los padres de lo ocurrido?"
Ante estos hechos, y tras no haber sido informados por el colegio del incidente, los padres solicitan una mayor atención para que no tengan lugar este tipo de agresiones en el centro educativo, además de pedir explicaciones de los motivos por los que no había profesorado supuestamente en el lugar, así como de la causa por la cual no fueron avisados inmediatamente de los hechos acontecidos, teniendo que ser el pequeño a la finalización del horario escolar quien relatara entre lágrimas y fuertes dolores lo ocurrido a sus padres. Puedes leer la noticia completa sobre la versión de los familiares aquí.
Por su parte, el Colegio Salesiano “Manuel Lora Tamayo” de Jerez desea precisar que la narración de los hechos no se ajusta a la verdad de los mismos, es decir que los padres no dicen la verdad en la información facilitada a este medio, obviando a su vez las publicaciones realizadas en redes sociales en días anteriores que se viralizaron en horas. En este sentido, afirman que desde la redacción no se contactó con el centro para contrastar la información versada por los padres y familiares antes de la publicación de la noticia, algo que no es cierto, ya que se intentó en innumerables ocasiones sin éxito.
Aclaran que se trata de un incidente contrario a las normas de convivencia, "una pelea entre un alumno de 5º de Educación Primaria y cuatro alumnos de 2º de Educación Primaria inducidos por otro compañero". El colegio confirma así el acto violento que sufrió el pequeño de 10 años, eso sí, rebaja de veinte agresores, como hizo constar el menor, a solo cinco.
Manifiestan igualmente en la misiva que durante la agresión, "una maestra de guardia en el recreo se percató e intervino, inmediatamente, separando a los alumnos implicados". Algo que no se le ha comunicado a los padres hasta el lunes, tras la publicación el domingo del artículo. Además, señalan que "tras preguntarle al alumno de 5º de Primaria por su estado, el alumno respondió que se encontraba bien y retomó el juego con normalidad, no dando muestras de malestar durante el resto de la jornada lectiva". Motivo por el cual no informarían a sus padres de que habría sido golpeado por un grupo de niños.
Desde elMIRA.es se intentó contactar con el colegio sin éxito, sin embargo desde la dirección del centro educativo telefonearon en la mañana del lunes a la redacción de este medio para manifestar su disconformidad con lo expuesto en el artículo por la familia del menor agredido, destacando que fueron 5 los alumnos agresores y no veinte como manifestó la víctima.
Durante su exposición de los hechos, y a pesar de los partes de lesiones, valoran las heridas como poco importantes, destacando que no apreciaron nada de gravedad, siendo únicamente vendado en la mano por inferir dolor: "el parte de lesiones existe, yo lo veré ahora, pero le harían una radiografía para vendarle la mano al muchacho. Se la vendaron porque dijo que se quejaba, y no tiene cita para la revisión".
El director comunica que "el hecho se produce, pero que es como si te pego una torta y me dices que te he fusilado". Había dos maestras en la zona del patio donde se produjo el altercado, la maestra tutora de segundo les separa y la jefa de estudios les entrevista y firman un acta (firmado el lunes tras la publicación el domingo de la noticia) en el que uno de los menores instó a otros más pequeños para que molestaran al agredido para quitarle un balón, no para pegarle. Quizás, los de segundo de primaria, al intentar quitarle la pelota, le hacen un roce o le caen, es una cosa de críos normal, pero la maestra está delante y lo para enseguida, luego ambos niños de quinto de primaria prosiguen jugando al fútbol".
Ante la pregunta de esta redacción de por qué no se informa a los padres de toda la información que el lunes por la mañana estaban dispuestos a compartir, el director del centro, Mario Pardos, lamenta que "se le comenta pero que el padre tiene una cosa contra nosotros de hace dos o tres años y busca una minivenganza, pero ha metido la pata en el motivo de la venganza".
La llamada tuvo lugar una hora antes de reunirse con los padres para informarles de su versión, en la que los padres han solicitado una mayor atención para que no tengan lugar este tipo de agresiones.
Los padres aseguran, que en la reunión que han mantenido en la mañana del lunes con el director Mario Pardos, la dirección del centro no ha hecho mayormente referencia al incidente de agresión, sino al daño a la imagen del colegio que ha provocado la noticia. Ante la crítica del director a la noticia publicada por este medio, De la Hera manifestó que el texto estaba correcto y que no había nada fuera de lugar ni que fuera mentira. El director recalcó que lo que necesitaban era lavar la imagen del colegio. Destacan que a las 14 horas de la tarde, a la salida del colegio del lunes, el pequeño indicó que los profesores le habían dado a firmar un documento, pero que desconocía su contenido. Se trata del parte del incidente al que se refiere el director que fue firmado tras producirse el mismo, sin embargo, no habría sido, según afirman sus padres, firmado hasta el lunes, un día después de publicarse la noticia. "No te han comentado para qué era el papel?" le preguntaron al niño tras llegar al domicilio, respondiendo el menor que desconocía el contenido. "Al ser un niño pequeño de 10 años, y ser instado por los profesores, ha firmado y ya está", destacan. En la reunión nos quedamos con lo que más le importaba al director, que había que lavar la imagen del colegio: "a mí con la edad que tengo no me va a faltar de comer en la vida, por lo cual, a estas alturas, lo que más importa es lavar la imagen". Para la dirección, durante el transcurso de la charla en el centro, no había ocurrido ningún tipo de agresión, a lo cual el padre contestó entregando el parte de lesiones del Hospital del SAS: "el director comenzó a leerlo en voz alta y terminó haciéndolo en voz bajita, enumerando todas las contusiones y golpes que el personal médico ha valorado en el informe". La familia, tras el comunicado del colegio y las nuevas informaciones, como la firma del documento por parte de su hijo el lunes, cuando afirman que activaron el protocolo de actuación el mismo jueves, se reservan en los próximos días tomar medidas, no descartando encauzar el caso por vía judicial. |
Desde el centro afirman que actuaron inmediatamente
En el comunicado enviado inciden en que "el centro actuó, según el protocolo establecido, desde el primer instante en que se conoció la situación. Ese mismo día se realizaron las investigaciones necesarias y, al día siguiente, se tomaron las medidas disciplinarias y educativas oportunas". Sin embargo, estas medidas que informan que tomaron el viernes no fueron comunicadas a los padres del niño agredido, siendo el lunes cuando le dan a firmar un documento en el que presuntamente firma el niño de 10 años la conformidad con la versión del colegio.
Ante las críticas de los familiares ante la presunta falta de docentes en la zona donde ocurrió el incidente, añaden que "el centro cumplía en todo momento con la ratio establecida para las guardias en el recreo. Incluso con un número superior a la misma".
En la nota informan que "la inspección educativa ha sido informada de los hechos y del procedimiento seguido y sigue de cerca el asunto, así como que la primera preocupación del centro sigue siendo la protección de todos sus alumnos y llegar a esclarecer la verdad de cualquier incidente que se produzca".
Ante las palabras de los padres sobre las llamadas y mensajes que estaban recibiendo de otros padres ante supuestos “sucesos similares” del pasado, señalan que "en ningún momento el centro ha mostrado pasividad".
