jueves. 28.03.2024
Javier Coterillo, presidente de Farmaquivir./ELMIRA
Javier Coterillo, presidente de Farmaquivir./ELMIRA

Diez de la mañana en la recepción del Hotel Riu en Madrid. Día frío y repleto de obras en las Plaza de España de la capital. El presidente de Farmaquivir, Javier Coterillo, nos recibe en la recepción. Madrileño, cuarenta y dos años, coach internacional, con varias empresas y más de 15 años de experiencia en el sector. 

“Después de lo que está sucediendo con la pandemia, decidimos emprender una titánica aventura.. Ser fabricantes de mascarillas de alta calidad” son las primeras palabras de este joven emprendedor que ha decidido comenzar la pasada primavera con la producción de mascarillas N95 FFP2 cumpliendo con todas las certificaciones que exigen la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) y la Agencia Europea del Medicamento (EMA).  Sus mascarillas reutilizables N95 FFP2 cuentan con todas las homologaciones para la CE, para Europa y la FDA, exigida por Estados Unidos.

Apasionado con su proyecto, Coterillo se declara optimista por obligación, “si eres emprendedor tienes que serlo. Necesitas ser optimista”, asegura mientras nos cuenta cómo empezó su aventura: “Hace cuatro años compré junto a un socio Farmaquivir en Lebrija (Sevilla). Desde entonces, somos proveedores de varias empresas en España y Europa. Estamos muy afincados en Andalucía”.

Tras esta etapa inicial, Farmaquivir adquirió una fábrica en Alcalá de Guadaíra la pasada primavera para la elaboración de las mascarillas. El proceso de puesta en marcha se prolongó desde el mes de julio, cuando recibieron las máquinas, hasta septiembre, después de pasar los pertinentes controles de calidad.

En la actualidad, está funcionando a pleno rendimiento la primera línea de producción. Se espera en un futuro próximo suministrar, además de las mascarillas, guantes, pantallas, gafas, batas e incluso esperan poder fabricar respiradores y test para el coronavirus cuando las cuatro líneas de producción estén operativas.

"Lo barato sale caro"

Coterillo defiende sin complejos “la marca España porque significa calidad. En Farmaquivir huimos de nacionalismos y de partidos políticos. Simplemente apostamos por un país del que nos sentimos muy orgullosos. El servicio al cliente, la fabricación y la calidad que damos llevan implícita la marca España”. 

Advierte también “que lo barato sale caro” a la hora de comprar mascarillas en el mercado internacional. “A mi como empresario me han engañado. Y al Gobierno español también. Hay que tener mucho cuidado. Tenemos interpuesta una demanda admitida a trámite ante la audiencia contra China por estafa por valor de tres millones de euros. Han tenido una situación abusiva con un producto de mala calidad cuando llegaba a España. Ojo con comprar en china que no es oro todo lo que reluce. Nosotros somos una empresa española y europea con certificados de garantía y de calidad. Hay trasparencia y comunicación que es lo que falta con china".

Ayudas del Gobierno

La inversión titánica, en palabras de Javier Coterillo, está siendo afrontada sin ayuda gubernamental. "La realidad es que estamos acometiendo esta aventura con la única ayuda del Banco de Santander. Ninguna administración publica nos ha llamado para interesarse por nuestra situación", nos cuenta amargamente Javier Coterillo aunque se muestra esperanzado en que la ayuda llegue a los autónomos que lo necesiten para que puedan abrir sus negocios.

El presidente de Farmaquivir cree que la vacuna ha venido para quedarse y se queja de la falta de información que hay en esta pandemia. "La gestión está siendo nefasta. Da igual de dónde venga. La falta de criterio y la desinformación es alarmante. Estamos todos muy perdidos con el uso de las mascarillas, los ivas, dónde comprar… No se aclara nadie. Cada Comunidad Autónoma dice una cosa. Hecho de menos un criterio general y contundente que nos permita estar tranquilos para saber a qué atenernos."

Javier Coterillo: "La gestión está siendo nefasta venga de donde venga"