viernes. 19.04.2024
Este es el motivo de la brutal paliza a 2 trabajadores de una plantación de droga en Málaga
Este es el motivo de la brutal paliza a 2 trabajadores de una plantación de droga en Málaga

Tremendo suceso en Andalucía, concretamente en la localidad malagueña de Vélez-Málaga, donde dos personas han recibido una brutal paliza después de que se produjera un robo en la plantación de marihuana que custodiaban.

Según la información que ha trascendido, la operación Verdoso, se ha saldado con la detención en Vélez-Málaga de cuatro personas, de edades comprendidas entre los 26 y los 49 años, como presuntos autores de dos delitos de secuestro, así como por delitos contra la integridad moral, robo con violencia, lesiones, amenazas y contra la salud pública. Las víctimas han sido personas residentes en el municipio.

Sayalonga, la localidad donde se encontraba la finca de marihuana
Sayalonga, la localidad donde se encontraba la finca de marihuana

En concreto, estas personas fueron contratadas para realizar labores de despalillado de marihuana en una finca de Sayalonga (Málaga), lugar donde fueron asaltados por un grupo de personas que les sustrajeron la mercancía. Cuando los propietarios de la plantación tuvieron conocimiento del robo, decidieron retener a los trabajadores que habían contratado, maniatándolos, interrogándolos y, a su vez, propinándoles una brutal paliza porque no los creían.

Las víctimas fueron liberadas días después con serias lesiones, tras realizar sus familiares un pago parcial del rescate solicitado. En el registro practicado en la finca donde se produjeron los hechos, fueron intervenidas 331 plantas de marihuana, una espada con la que provocaban quemaduras a sus víctimas y una hamaca con restos biológicos coincidentes con la sangre de los agredidos.

Secuestro en Sayalonga

Agentes de la Comisaría Local de Vélez-Málaga recibieron hace algunos meses la denuncia de un ciudadano que manifestaba haber estado retenido durante tres días en una finca situada en la localidad de Sayalonga (Málaga).

Las pesquisas pudieron averiguar que el denunciante habría sido contratado, junto a dos personas más, para trabajar en una plantación de marihuana en una finca rústica. La tarea consistía en el despalillado y secado de las plantas antes su distribución y venta.

Durante una madrugada, los contratados sufrieron un asalto por parte de tres individuos encapuchados que, esgrimiendo un arma de fuego y machetes, sustrajeron toda la mercancía. Tras comunicar los asalariados el robo de la droga a los propietarios, estos decidieron retener a dos de los hombres en la misma finca porque desconfiaban de ellos.

Maniatados e interrogados

Las víctimas fueron interrogadas y maniatadas durante varios días. Las agresiones se fueron sucediendo e incrementando durante este periodo, iniciándose los interrogatorios con golpes, siendo incluso forzados a comer estiércol o cocaína, llegando a derivar a técnicas más duras como arrancarles mechones de pelo o marcarles la piel con un hierro incandescente.

Seguidamente se localizó a una segunda víctima, quien no habría denunciado lo ocurrido por miedo. Esta fue liberada antes que el denunciante, debido a que su familia realizó un pago de 15.000 euros por su rescate. La víctima que comunicó lo sucedido a la policía habría sido también liberada, posteriormente, tras haber acordado su pareja con los secuestradores el pago de 30.000 euros y la transferencia de un vehículo propiedad de la víctima.

Ante la gravedad de los hechos, los investigadores determinaron realizar un dispositivo de urgencia, que permitiese tanto el arresto del principal investigado, autor de la mayoría de las agresiones, como del resto de implicados.

  • Grupo I de Crimen Organizado de Málaga
  • El Grupo de UDYCO
  • El Grupo Local de Policía Judicial, ambos adscritos a la Comisaría Local de Vélez-Málaga
  • Colaboración de la Brigada Provincial de Policía Científica de Málaga

Detenciones

De esta manera, cuatro persona fueron detenidas en la zona de la Axarquía, presuntas responsables de dos delitos de secuestro, así como por delitos contra la integridad moral, robo con violencia, lesiones, amenazas y contra la salud pública, según ha podido confirmar este medio.

331 plantas de marihuana, una espada --con la que provocaban quemaduras a los secuestrados-- y una hamaca con restos biológicos compatible con la sangre de las víctimas fueron intervenidas en el registro. El juzgado de Instrucción Numero 3 de Vélez-Málaga responsable de las diligencias ordenó el ingreso en prisión de dos de los arrestados, mientras que el resto quedó en libertad con cargos.

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